

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
En un género donde la táctica suele pesar más que la historia, Skygard Arena intenta ofrecer ambas cosas: una campaña con trasfondo narrativo y un modo multijugador diseñado para quedarse. Desarrollado por Gemelli Games, este título de estrategia por turnos nos lleva a un universo dividido en cinco grandes facciones que, tras una guerra devastadora, deciden resolver sus conflictos en una arena. Allí, los campeones de cada clan luchan por el control de unas minas de cristal —fuente de poder y ambición— y por una misteriosa corona ancestral capaz de alterar el equilibrio del mundo.
La protagonista de esta historia es Na Jima, una cazadora que representa a su clan en el torneo. Su papel es el punto de partida para conocer a un elenco de diez héroes jugables, cada uno con habilidades únicas, personalidades diferenciadas y estilos de combate variados. Desde tanques como Champei, un monje panda de movimientos lentos pero poderosos, hasta especialistas en daño a distancia o magos de apoyo, el juego apuesta por la diversidad táctica como su carta principal.
El modo Campaña funciona como una introducción al universo de Skygard Arena. Consta de tres actos y un total de 13 misiones, una duración que, si bien cumple con enseñar las mecánicas básicas, se siente corta para el potencial narrativo que plantea.
Publicidad
La historia tiene un contexto interesante, con conflictos políticos y rivalidades entre facciones, pero no logra profundizar en los personajes ni en el trasfondo de su mundo. Las secciones de campamento, donde podemos conversar con nuestros compañeros entre misiones, son una buena idea para conocerlos más, pero se quedan en diálogos breves y una escritura irregular. Es evidente que el guion pasó por un proceso de localización que afectó la naturalidad de las conversaciones.
Aun así, como tutorial extendido, el modo historia cumple: enseña las dinámicas de movimiento, control de áreas y gestión de habilidades sin abrumar al jugador. Es el punto de partida ideal antes de entrar al modo Arena, que es donde Skygard Arena realmente brilla.
El verdadero encanto del título está en su Modo Arena, un sistema de combates 3v3 donde se enfrentan equipos de tres héroes por el control de pilares en el mapa. Cada partida es una carrera hasta los 25 puntos, obtenidos al mantener zonas de control o eliminar enemigos. Los mapas son cuadriculados y, aunque algo pequeños en apariencia, ofrecen suficiente espacio para maniobras tácticas, posicionamiento y juego inteligente.
El sistema de movimiento y habilidades está bien calibrado. Cada héroe cuenta con tres habilidades principales y una definitiva que se activa al progresar en la partida. Además, las combinaciones posibles entre Personas (variantes de habilidades) y Reliquias (objetos con efectos pasivos) son enormes. Gemelli Games afirma que existen más de 500.000 combinaciones posibles, lo que incentiva la experimentación y la creación de estrategias personalizadas.
Publicidad
Los enfrentamientos, aunque tácticos, pueden sentirse algo lentos, especialmente cuando se enfrentan héroes de movilidad reducida como Champei. En contraste, personajes más rápidos como Aidan o Daerio dominan con facilidad, aprovechando habilidades de teleportación y curación para controlar el ritmo del combate. Este desequilibrio entre movilidad y daño obliga a pensar bien la composición del equipo antes de cada partida.
A primera vista, Skygard Arena puede parecer un híbrido entre un MOBA y un RPG táctico. Su estética recuerda a League of Legends o DOTA 2, con héroes de aspecto caricaturesco y animaciones coloridas, pero la jugabilidad se acerca más a títulos como Fae Tactics o Into the Breach, donde la colocación y la sinergia pesan más que los reflejos.
Cada combate se juega por turnos, y el éxito depende de aprovechar coberturas, controlar el espacio y anticipar los movimientos del rival. La lectura del mapa es clara y limpia: los personajes se distinguen fácilmente y los efectos visuales de habilidades no saturan la pantalla. Esto es crucial para mantener la legibilidad en partidas intensas.
La curva de aprendizaje es amable, pero exige paciencia. Los primeros encuentros son una mezcla de ensayo y error, donde el jugador descubre qué combinaciones de héroes funcionan mejor. Una vez dominadas las sinergias, las batallas se vuelven mucho más dinámicas.
Visualmente, el juego adopta un estilo cartoon-fantástico muy colorido, con héroes bien diferenciados y mapas variados que van desde bosques místicos hasta arenas cerradas. Aunque el diseño es agradable y funcional, los escenarios pueden sentirse vacíos: faltan elementos interactivos como estructuras destructibles o trampas ambientales que aporten dinamismo.
A nivel técnico, el rendimiento es estable. Skygard Arena corre sin problemas notables, incluso en equipos modestos. Las animaciones son fluidas, y las transiciones entre turnos están bien optimizadas. No obstante, algunos efectos de iluminación y partículas podrían tener más detalle para reforzar el impacto visual de las habilidades definitivas.
El apartado sonoro cumple, pero no destaca. Las melodías de fondo acompañan bien las partidas sin distraer, aunque carecen de la épica o la identidad musical que uno esperaría en un título de fantasía. Las voces —cuando aparecen— están bien interpretadas, pero la mezcla de audio entre efectos, ambiente y música a veces resulta inconsistente.
Publicidad
El diseño de sonido de los ataques, especialmente los golpes mágicos y los proyectiles, es convincente y ayuda a transmitir el peso de las acciones. Sin embargo, se echa en falta una mayor variedad de efectos auditivos entre héroes, lo que haría que cada uno se sintiera más único.
En términos de jugabilidad, Skygard Arena ofrece un sistema táctico sólido y profundo. Cada turno requiere decisiones significativas: moverse, atacar o activar habilidades especiales. La gestión del terreno, el posicionamiento y el control de pilares son elementos clave para ganar.
El juego fomenta la cooperación y la sinergia entre héroes. Combinar un personaje que pueda empujar enemigos con otro que cause daño en área puede ser devastador. Esa sensación de planear y ejecutar una estrategia con éxito es donde Skygard Arena muestra su mejor versión.
Publicidad
Sin embargo, la velocidad del combate es uno de sus puntos débiles. En partidas largas, la falta de dinamismo puede volverse monótona, especialmente cuando los turnos se extienden demasiado. Aun así, el formato de partidas de unos 15 minutos mantiene la experiencia contenida y accesible.
El modo online permite jugar tanto partidas casuales como competitivas. El emparejamiento funciona correctamente y ofrece la opción de enfrentarse contra amigos o contra la IA, ideal para quienes prefieren practicar sin la presión del ranking.
No obstante, el futuro del juego dependerá en gran medida de su comunidad. La cantidad de contenido inicial puede quedarse corta para mantener el interés a largo plazo, y Gemelli Games deberá seguir añadiendo héroes, modos o eventos para mantener viva la Arena.
En este sentido, Skygard Arena tiene el potencial de consolidarse como una propuesta constante en el género, siempre que logre construir una base de jugadores fieles y activa.
Skygard Arena es un primer paso sólido para Gemelli Games: un juego táctico que combina el combate por turnos con el estilo competitivo de los MOBAs, ofreciendo profundidad estratégica y una buena dosis de experimentación. Aunque su campaña es corta y la historia no logra despegar, su sistema de combate y personalización le dan una identidad clara.
Recomendado para quienes disfrutan de los desafíos tácticos, de planear cada movimiento con precisión y de encontrar combinaciones de habilidades que dominen el campo de batalla. Si buscas una historia envolvente o un ritmo frenético, quizás no sea tu juego. Pero si valoras la táctica pura y las batallas por estrategia más que por reflejos, Skygard Arena tiene mucho para ofrecer.
Publicidad
¡Volker únete a nuestra comunidad y vive la emoción de nuestros contenidos exclusivos! Síguenos en Instagram, Facebook, Youtube, Tiktok y WhatsApp para no perderte ni un solo detalle de nuestras últimas noticias, eventos y sorpresas especiales.