“Vamos a retirar los 108 perritos que estaban haciendo este supuesto servicio de seguridad”, aseguró Claudia López.
Esta decisión de la alcaldesa de Bogotá provocó opiniones encontradas entre los ciudadanos: algunos la rechazaron porque los canes “son ayuda para los celadores” y otros la defendieron al considerar que “no es la vida que ellos se merecen”.
El anuncio se realizó en el mismo evento donde se puso en funcionamiento una nueva flota de buses de Transmilenio a gas.