Con drones y un infiltrado, así desmantelaron gran venta de droga en el occidente de Bogotá

Con drones y agentes infiltrados, la Dijín de la Policía puso al descubierto uno de los centros de venta de drogas más grandes del occidente de Bogotá. Tras una persecución por la zona, los policías capturaron al presunto jefe de la banda.

El comercio ilegal se realizaba ante la mirada y supervisión de unos hombres encargados de la seguridad de la improvisada carpa hasta donde llegan los adictos, a quienes ponían a hacer fila para venderles la droga. Los traficantes en el sitio instalaron una falsa pared para escapar en caso de llegar la Policía.

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El consumo y el tráfico de drogas tenían desesperados a los vecinos de esa zona de Kennedy, en Bogotá.

“Esos muchachos que decían ser recicladores se metían al caño, a esa invasión y era a fumar bazuco. Aprovechaban y atracaban a las personas que transitaban ese lugar”, contó una víctima de la banda La Igualdad.

Denunció que regalaban dosis a los niños para después volverlos parte de la red.

“Aprovechaban también para incitar a los muchachos sanos del barrio a que consumieran bazuco”, aseguró.

Tras las denuncias, la Dijín llegó a la zona y con drones empezó a vigilar y a identificar a los miembros de la banda.

“Alias ‘Emiro’ como cabecilla y a través de la fachada de reciclador tenía un centro de acopio de estupefaciente donde guardaban lo que ellos normalmente llaman la bomba y desde ahí salía su distribución a través de su pareja sentimental alias ‘Lina’”, indicó el general Fernando Murillo, director de la Dijín.

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Al sentir la presencia de la Policía, alias ‘Carlitos’, el tercero al mando de la banda, trató de ocultarse de la Policía y luego emprendió la fuga.

En la persecución los policías lo rodearon, pero alias ‘Carlitos’ hábilmente los esquivó y se metió en otra guarida, uno de los tubos de desagüe de aguas negras del caño donde finalmente fue capturado.

“Se les está imputando concierto para delinquir en concurso homogéneo con tráfico y expendio de estupefacientes”, señaló Murillo.

A los tres jefes de la banda capturados un juez los envió a la cárcel.