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El cambuche de los rompevidrios: en una montaña de Bogotá ocultaban armas de juguete y bolsos

Autoridades descubrieron que, en un punto de la carrera Séptima con calle 93, habían montado un escondite al que llevaban todo lo robado. 
Videos que circulan en redes sociales evidencian cómo delincuentes realizan sus fechorías en varias esquinas de la capital y luego corren a ocultarse en estos cambuches.
“Yo iba pasando por la Caracas con 13, adelante se estacionó un taxi y en ese momento se me vienen cuatro personas. Vieron que en la parte de atrás tenía un maletín, lo distraen a uno y en la parte de atrás me rompieron el vidrio”, narra Fernando Torres, víctima.
Y estos rompevidrios también actúan en el sur y norte de Bogotá.
Autoridades pudieron comprobar que muchos de los elementos hurtados terminan dentro del cerro. Al sitio, identificado por la Policía, se puede acceder por tres lugares.
Un equipo de Noticias Caracol acompañó al grupo especial de la Sijín en su ingreso a esta zona. Allí pudo evidenciar que se encontraron un sinnúmero de botellas de licor, billeteras, bolsas que revelarían actos esotéricos y pistolas de juguete que, en muchos casos, utilizan para asaltar a sus víctimas.
Expertos como César Augusto Hernández, abogado criminalístico de la Universidad Manuel Beltrán, explican que los elementos robados suelen ir a parar “al mercado ilegal, a casas de compraventas, ventas informales en las calles”.
Esta intervención de las autoridades hace parte de la ofensiva que adelantan contra los rompevidrios que, dicen, suelen actuar en los siguientes puntos : calle 134 con avenida 19; calle 127 con autopista Norte; autopista Norte entre calles 94 y 153; calle 100 con autopista Norte; avenida Suba entre calles 116 y 127, avenida Las Américas entre carrera 50 y avenida Boyacá; avenida Boyacá con autopista Sur; a lo largo de la avenida Primero de Mayo, y la carrera Séptima entre calles 116 y 134.
Sin embargo, uno de los elementos que más les preocupa a los policías es la falta de denuncias, por eso invitan a las víctimas a denunciar.
Desde este lunes, en varios ejes viales, habrá 300 policías encubiertos al acecho de los rompevidrios.
 

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