“Es muy humillante para nosotros”, señaló Laura Brand, la ciudadana española. Ejército se disculpó en un comunicado.
Laura y su amigo colombiano Santiago intentaron ingresar al Museo Militar, como parte del recorrido turístico que realizan en Bogotá, pero al llegar al lugar el suboficial que estaba de guardia les negó el acceso.
“Nos dijo que no podíamos ingresar con la mascota. Le ratificamos que no es una mascota, sino que es un perro de asistencia, un perro lazarillo y nos siguió negando el derecho a entrar", relató Laura.
Según el Código de Policía, en el artículo 124 está consignado que se prohíbe: “impedir el ingreso o permanencia de perros lazarillos que, como guías, acompañen a su propietario o tenedor, en lugares públicos, abiertos al público (...) o en edificaciones públicas o privadas".
Tras lo sucedido, los jóvenes no tuvieron más alternativa que abandonar el lugar, pero le pidieron al Ejército que brinden capacitación para evitar “más situaciones de discriminación”.
Al respecto, el comando general de las Fuerzas Militares emitió un comunicado: "Reconocemos que por desconocimiento de un suboficial que se encontraba prestando la guardia, no se permitió́ el ingreso del perro guía a las instalaciones del Museo ((...)) ofrecemos excusas a las personas afectadas".