En el banco de documentos también reposan pasaportes, libretas militares y licencias de conducción que aguardan a ser encontradas por sus dueños.
Estos papeles se extravían todos los días en entidades bancarias, oficinas de pago de servicios públicos, estaciones de Transmilenio y hasta en la calle.
Iván Casas, secretario de Gobierno de Bogotá, calcula que si todos estos documentos regresaran con sus dueños, los ciudadanos se ahorrarían 950 millones de pesos.
Por eso, el Distrito habilitó en el primer piso del centro comercial Gran Estación un punto de atención para devolver, de forma gratuita, estos papeles a sus dueños.
Si usted perdió el documento pero ya había tramitado uno nuevo, recuerde que el que apareció ya no es válido y debe solicitar su destrucción con una carta dirigida a la Registraduría y que puede entregar en ese mismo sitio.