Les ofrecieron programas educativos a bajo costo y después de estudiar por años se enteraron de que la organización era ilegal.
La organización tenía una página de internet en la que se presentaba como una asociación de profesionales que trabajaba desde el año 2000 con programas educativos y que tenía el respaldo de importantes universidades del país.
Una de las víctimas se inscribió al programa y a través de las redes contactó a la directora de la fundación. El docente se inscribió y convenció a otros colegas a que hicieran lo mismo, pero al terminar los estudios se enteraron de que los diplomas no tenían soporte.
Fueron unos 300 profesionales los que pagaban hasta 2 millones de pesos para acceder a los programas. Finalmente denunciaron el fraude y se logró la captura de cinco personas, quienes deberán responder por concierto para delinquir, estafa en mayor cuantía y uso de documento público falso.
Publicidad
A tres de los aprehendidos les dictaron casa por cárcel mientras que los otros quedaron en libertad.
La Policía recomienda a los interesados en estos programas que verifiquen ante el Ministerio de Educación el estado legal de las instituciones con las que están adelantando sus cursos virtuales y así evitar caer en el fraude.
Publicidad