"Iniciamos un proceso de bioremediación a través de largas de moscas, en el cual se le limpió completamente la carne podrida. Siguiendo las instrucciones de los veterinarios, recuperamos el individuo", explicó Maykoll Parra, biólogo serpentólogo.
La tala de bosques hace que estas especies se desplacen a zonas pobladas en busca de alimentos, como roedores y aves, y queden en riesgo.