Esperanza Torres necesitaba una transfusión urgente, pues llegó al hospital con un complejo caso de anemia.
Torres llevaba 15 días de sangrado, su situación era crítica y en los bancos de sangre de Caquetá no había el tipo B+.
Entonces, los médicos del Hospital María Inmaculada de Florencia acudieron al Ejército y cinco soldados se prestaron para hacer las transfusiones necesarias.
"El hospital no la tenía, los soldados de la brigada XVIII, de una manera muy humana, atendieron este llamado”, explicó el general Jorge Herrera, comandante de la VI división del Ejército.
Según los doctores, esta donación fue clave para salvarle la vida a la lideresa.
Compañeros de Esperanza Torres resaltaron su trabajo.
"Es la presidenta de la junta de acción comunal de la vereda Agua Bonita, antiguo espacio territorial. Es la líder social, la persona que nos representa en la comunidad, responsable del consejo de reincorporación”, aseguró Reynaldo Martínez, que trabaja con ella.
La mujer ya fue dada de alta.