Giovanni Abelardo Ortiz afirmó que se sentía amenazado y que lo iban a asesinar. La captura de los otros tres sospechosos del crimen ya fue legalizada.
Los cuatro implicados en el homicidio de los recién casados Nathalia Jiménez y Rodrigo Monsalve,
cometido en Santa Marta el pasado 20 de diciembre, fueron enviados a prisión.
Giovanni se entregó el 24 de diciembre en Buritaca porque “estaba asustado, que se sentía amenazado, que lo estaban persiguiendo y que lo iban a asesinar”, según el coronel Juan Carlos Aparicio, comandante de la segunda brigada del Ejército.
“Se entrega porque vio las noticias del gran despliegue militar que hicimos en toda la troncal del Caribe”, agregó.
Tras su entrega y con base en la entrevista que le dio al fiscal, se procedió a realizar “dos allanamientos en el sector de Buritaca. Producto de estos allanamientos, que se hicieron en coordinación con la Sijín de la Policía, se logra la captura de tres personas
por porte ilegal de armas y el decomiso de dos armas de fuego cortas”.
Mientras los otros tres sospechosos eran trasladados a la audiencia de legalización de captura, la mamá de uno de ellos se abalanzó sobre su hijo, a quien cree inocente, y le gritaba “¡te he enseñado valores!”.
Giovanni fue imputado por homicidio agravado, secuestro, porte ilegal de armas y hurto, cargos que rechazó.