Una operación simultánea en Colombia, República Dominicana y Puerto Rico terminó con la captura de 20 personas, integrantes de una estructura señalada traficar con cocaína.
El operativo realizado entre la agencia estadounidense para la lucha contra las drogas, DEA, la Fiscalía, el Ejército y la Armada Nacional terminó con la captura de 11 presuntos narcotraficantes pedidos en extradición.
En una lujosa casa de El Poblado, en la capital antioqueña, cayó Dalberto Rincón alias ‘Bambam’, quien según los investigadores sería uno de los jefes de la organización, perteneció al Ejército Nacional como soldado profesional y en 2017 había sido capturado por el delito de homicidio en persona protegida, sin embargo, quedó en libertad luego de que presentó una solicitud ante la Justicia Especial para la Paz (JEP) y fue cobijado por esta jurisdicción. Otras capturas tuvieron lugar en varias ciudades del país como Bogotá, Medellín, Cúcuta, Cartagena, Santa Rosa (Bolívar) y Riohacha.
Esta estructura señalada de sacar la mayor cantidad de cocaína desde la región del Catatumbo hacia los países del Caribe, según las autoridades movía entre tres y cinco cargamentos de droga mensuales.
En el inmueble donde fue capturado Dalberto Rincón se encontraron camionetas blindadas, objetos de alto valor, armas de fuego y documentación que permitió identificar propiedades y sociedades que harían parte del patrimonio ilícito, según un comunicado de la Fiscalía.
Para las autoridades alias 'Bambam' y el 'Gordo Guillermo', capturado en Cartagena, serían los inversionistas de la estructura narcotraficante, los coordinadores de la producción y compra de la cocaína, y quienes presuntamente disponían de los medios de transporte y logística para garantizar la salida de la droga desde Colombia.
Según las investigaciones, esta red financió durante cinco años la producción de clorhidrato de cocaína en zona rural de Tibú (Norte de Santander) y compró el estupefaciente procesado a la banda criminal Los Pelusos. La droga que salía del Catatumbo era trasladada hasta Isla Margarita en Venezuela, de ahí enviada a Puerto Rico y República Dominicana, parte de la cocaína se quedaba en los países del Caribe y otra terminaba en Estados Unidos y Europa.
Por Venezuela llegaban a Cúcuta los pagos de los cargamentos, que luego eran distribuidos a Medellín, Bogotá, Cartagena y otras ciudades, donde se realizaban inversiones en vehículos, propiedades y negocios que servían de fachada para legalizar el dinero obtenido mediante el narcotráfico.
Foto: captura de video Fiscalía
Updated: marzo 10, 2018 12:44 p. m.