En una de sus últimas decisiones antes de hacer efectiva su renuncia al Pontificado el próximo 28 de febrero, Benedicto XVI quiso establecer así esta nueva división administrativa de la Iglesia Católica en Colombia, que cuenta con 36.000 católicos y seis parroquias repartidas por una extensión de 64.000 kilómetros cuadrados.
Así, el Vaticano separó el Vicariato Apostólico de San Vicente-Puerto Leguízamo.
Junto a su creación, el papa ha nombrado al colombiano Joaquín Humberto Pinzón Güiza (Berbeo, 1969), superior regional de los Padres de la Consolata en Colombia-Ecuador, primer vicario apostólico de Puerto Leguízamo-Solano y le ha asignado además la sede titular episcopal de Ottocio.
Ordenado sacerdote en agosto de 1999, Pinzón Güiza fue enviado de 1991 a 1994 a Madrid, al Teologado Internacional de los Misioneros de la Consolata, tiempo en el que estudió Teología en la Universidad Pontificia de Comillas, para después y hasta 1996 desplazarse como misionero a Mozambique.
El nuevo vicario apostólico ha sido rector del Seminario Teológico de los Misioneros de la Consolata en Bogotá (2005-2009), profesor de Sagradas Escrituras en la Fundación Universitaria San Alfonso de Bogotá (2007-2009), consejero regional del Instituto de Colombia-Ecuador (2008-2011), y desde 2011 superior regional de esta institución.
El nuevo Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo-Solano comprende los municipios de Leguízamo (Putumayo) y de Solano (Caquetá), así como la localidad de Puerto Alegría (Amazonas) y un espacio de 5 kilómetros cuadrados que va desde Guaquirá hasta Angostura (Putumayo-Amazonas).
Esta nueva división administrativa deja al antiguo Vicariato Apostólico de San Vicente-Puerto Leguízamo al que pertenecía con una superficie de 31.000 kilómetros cuadrados, en los que se albergan 12 parroquias y viven 84.000 católicos.
Updated: febrero 21, 2013 04:11 p. m.