El oleoducto trasandino es el blanco de las FARC en la costa pacífica nariñense. Así lo demuestran carteles, pendones y banderas de la guerrilla colgados en las viviendas que quedan a lado y lado de la vía que de Pasto conduce a Tumaco.
Con frecuencia es necesario detener el tráfico para realizar labores militares y hasta las escuelas están marcadas con banderas del abatido jefe rebelde alias ‘Alfonso Cano’.
"En Tumaco reportados hay casi 3000 muertos. Hoy la inseguridad es un problema que ha cambiado de tinte político (…) hay una sensación de orfandad y terror", dijo Rodrigo Gómez, líder cívico.
Los funcionarios de Ecopetrol deben ingresar a la zona acompañados por técnicos antiexplosivos del Ejército ante la latente amenaza. Y es que, a pocos metros de las casas de los tumaqueños, el terreno está minado.
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El Ministro de Defensa ordenó recientemente la intervención en Tumaco con 150 nuevos uniformados, expertos en inteligencia militar.
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