Durante el homenaje del presidente a los miembros de las Fuerzas Armadas, esta mujer, hermana del subintendente Jorge Alzate Patiño asesinado por las FARC, se negó a saludar al presidente Santos.
Minutos después el mandatario aseguró que entiende esa actitud, y que es precisamente por ese dolor de las familias de las víctimas que se debe parar la guerra.
“Yo soy el primero en reconocer que por cualquier ser querido, a una madre a una hermana, como hoy lo vimos, una condecoración no les va a devolver a sus seres queridos".
Por eso insistió en su lucha.
“Es un dolor comprensible, una rabia que todos sentimos, por eso mismo para que ese dolor y esa rabia no se vuelvan a sentir, los colombianos estamos empeñados en conseguir la paz.
Santos recordó que lleva diez años entregando condecoraciones a familias de las víctimas y que su meta es que no tener que repetir estos actos.
Updated: abril 12, 2016 06:57 p. m.