Los restos de otra desaparecida civil en la toma guerrillera del Palacio de Justicia de Colombia y su recuperación por el Ejército en 1985 fueron identificados, con lo cual la cifra de desaparecidos descendió a nueve.
Sofía Velásquez, hija de la víctima, María Isabel Ferrer, lo confirmó este jueves en entrevista con W Radio: "El martes nos dieron una notificación de que habían encontrado los restos de mi mamá, más exactamente los pies, solamente los pies".
Ferrer visitaba ocasionalmente el Palacio de Justicia, sede del Consejo de Estado y la Corte Suprema de Colombia, cuando la extinta guerrilla M-19 (Movimiento 19 de Abril) se tomó el edificio el 6 de noviembre de 1985.
Tras su violenta recuperación por parte del Ejército, el saldo que quedó fue de un centenar de muertos -entre ellos 11 magistrados- y 11 desaparecidos de la cafetería.
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Ferrer no entró en ese momento a la lista de desaparecidos porque sus parientes velaron durante años una tumba con su nombre.
Pero en octubre pasado, la Fiscalía colombiana anunció el hallazgo de tres personas en paradero desconocido -Cristina del Pilar Guarín, Luz Mary Portela y Lucy Amparo Oviedo-, dos de las cuales estaban en tumbas con otros nombres, una de ellas correspondía a la de Ferrer.
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Entonces, la mujer ingresó a la lista de desaparecidos. Sin embargo, esta semana la Fiscalía reveló que los restos de Ferrer sí estaban en la fosa con su nombre, pero mezclados con los de Guarín.
"En la tumba de mi mamá había dos cadáveres" según los investigadores, afirmó Velásquez. "Inicialmente, como que no hicieron el estudio de todos los restos óseos y ahora se dieron cuenta que los pies que se encontraban ahí eran los de mi mamá", aclaró.
"Imagínese el dolor que esto causa y que nos estén anunciando cómo encuentran resto a resto", añadió.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado colombiano hace un año por las desapariciones forzadas y la detención ilegal y tortura de personas consideradas por el Ejército como presuntos colaboradores del M-19.
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En el marco de esa sentencia, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, pidió perdón en noviembre pasado debido a la responsabilidad del Estado en esos hechos.
La guerrilla M-19, de la que hacían parte el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro y el senador Antonio Navarro, firmó un acuerdo de paz en 1990.
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