El expresidente de Corficolombiana es señalado de conocer acerca del soborno de US$6,5 millones que la multinacional entregó para adjudicarse la Ruta del Sol II.
El último paso para el inicio del juicio contra José Elías Melo, expresidente de Corficolombiana, principal socio de Odebrecht en Colombia, terminó con un jalón de orejas a los empresarios brasileños Luiz Antonio Mameri, Luiz Eduardo da Rocha Soares y Luis Antonio Bueno Junior.
“Es que a Colombia no nos está beneficiando, es a ellos, ni le están haciendo un favor a la justicia colombiana ni a la sociedad colombiana”, dijo el juez 14 de conocimiento.
El llamado de atención también fue al fiscal del caso, Juan Alberto Delgado, quien pidió aplazar la audiencia porque aún no se ha aprobado el acuerdo de colaboración para los extranjeros. La audiencia se ha aplazado en cuatro oportunidades.
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“La diferencia entre menso y manso no es una vocal, entonces que nos respeten a la autoridad colombiana”, añadió el togado.
La arremetida del juez provocó una carta de los empresarios. Allí, señalan que siempre han enviado oportunamente la información por la Fiscalía colombiana y que en esta oportunidad estuvieron listos para declarar contra Melo a través de videoconferencia.
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“El acto en Brasil inició puntualmente a las 11 horas, horario de Brasilia. Sin embargo, no fue establecida conexión por parte de las autoridades colombianas, resaltándose que el sistema de conexión por parte de Brasil estaba en plena operación y fue debidamente probado”, dice la misiva.
La molestia del juez, que aclaró que el beneficio por colaboración lo definirá el nuevo fiscal ad hoc, lo llevó incluso a advertirle al delegado de la fiscalía colombiana que ante un nuevo aplazamiento pedirá que sea investigado.
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