El primer caso ocurrió cuando la Policía halló dos cuerpos en bolsas maniatados y envueltos en papel chicle en el barrio Naranjal cerca de la estación suramericana de Metro.
Otro de los casos fue en el barrio Francisco Antonio Zea, al noroccidente de Medellín, dos hombres fueron asesinados por motociclistas, al parecer eran miembros del grupo delincuencial ‘Pájaros Azules’.
Según el alcalde de Medellín Federico Gutiérrez, estas muertes se deben a venganzas entre combos delincuenciales.
En el barrio La Mota, fue asesinada con arma de fuego Olga Lucía Cardona, quien brindaba información en un proceso judicial sobre combos delincuenciales del barrio Belén Rincón.
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Los otros dos casos corresponden a un agricultor de 37 años en la vereda Palmitas y el de un habitante de calle en el barrio San Benito. Ambos murieron por múltiples heridas con arma de fuego.
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