Cuando le preguntaron por qué le hacía eso al pequeño, ella contestó que por “tremendo”. Ahora, podría pagar hasta 12 años de cárcel por su mal proceder.
La escena, grabada en video por un patrullero, sucedió en el corregimiento de Caracolicito, en el municipio de Copey (Cesar).
“Es un maltrato físico y psicológico del menor que no puede estar pasando”, declaró la defensora de familia María Elvira Salcedo.
“Se le encuentran algunas lesiones que aparentemente indican que había sido maltratado en la residencia, pero es importante señalar que se encontró amarrado”, dijo por su parte el comandante de la Policía del Cesar, coronel Diego Rosero.
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El menor quedó en manos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar mientras se define la suerte de su progenitora.
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