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Los instrumentos de los 136 centros de enseñanza de la Fundación Nacional Batuta podrían estar en riesgo de silenciarse, puesto que el recorte presupuestal del Ministerio de Cultura para el año entrante tiene en vilo miles de estudiantes y trabajadores.
Con más de 30 años formando a niños y jóvenes en condiciones de vulnerabilidad, la Fundación Nacional Batuta se ha convertido en un emblema de la formación artística del país. De no conseguirse los recursos que necesitan, podrían interrumpirse los sueños de centenares de estudiantes.
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María del Rosario Osorio, exmiembro de la fundación y profesora, es ejemplo vivo del impacto de Batuta. Hace unos años, ella también era una de las niñas que soñaba con cumplir sus sueños musicales, una esperanza que ha logrado cumplir.
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Lucía González, presidenta de la Fundación Nacional Batuta, afirmó a Noticias Caracol en vivo que en el 2024 la entidad benefició a cerca de 20 mil niños. "Hoy no tenemos la más remota certeza de poder decir alguno de estos centros musicales se abre. Lo más seguro es que Sonidos de Esperanza que es ese programa se cierre y tengamos que transitar hacia el programa Sonidos para la Construcción de Paz", señaló.
La directiva dijo a este informativo que, con la caída de la Ley de Financiamiento, el Ministerio tiene que hacer una reconfiguración de su presupuesto, y, de momento, no ha dado certeza a Batuta, por lo cual prevén que la respuesta será en un porcentaje "muy inferior al que veníamos recibiendo históricamente de los gobiernos nacionales".
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Para los expertos, resulta contradictorio que iniciativas como Batuta estén en riesgo. "Es muy triste que un semillero tan importante, de tantos años, llegue a su fin en este momento... no concuerda en nada, la mayoría de planes de gobierno se fundamenta en educación, cultura y deporte" resaltó el docente de música Carlos Andrés Yepes.
Los padres de los alumnos también han manifestado su inquietud, ya que consideran que es un programa que beneficia a los menores y los aleja de malos hábitos, además de ayudarles a su crecimiento personal.
Aunque el ministro de Cultura, Juan David Correa, asegura que la Fundación Nacional Batuta es prioridad en su administración, cientos de trabajadores y beneficiados no saben si continuarán en la institución en el 2025.
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