Desde hace unos días, las autoridades han estado monitoreando la tormenta Franklin, que ha provocado lluvias e inundaciones en diferentes partes de Colombia, especialmente en el Caribe, y que cobró fuerza en la madrugada de este martes, 22 de agosto de 2023.
De acuerdo con la mayor Carolina Rueda, jefe de la oficina de pronóstico y alertas del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), la tormenta Franklin hace parte de la temporada de ciclones tropicales en el país que va hasta el próximo 30 de noviembre y que está relacionada con una perturbación en los vientos.
Si bien se prevé una disminución significativa de las tormentas esta semana, hasta el momento la tormenta ha dejado múltiples afectaciones en los sectores de mayor exposición, ya que se han presentado precipitaciones e inundaciones. Además, 160 municipios se encuentran en alerta roja por posibles deslizamientos de tierra.
Dentro de los municipios más afectados por la lluvia se encuentran Bucaramanga y Girón, en Santander, donde el río de Oro se desbordó e inundó varias viviendas, lo que provocó el colapso de muchas de ellas y las dejó inhabitables. Lamentablemente, un niño de 8 años murió tras la creciente del afluente.
De acuerdo con la Policía de Bucaramanga, el menor falleció tras ser arrastrado por el río de Oro en un aparente descuido de sus padres, pues el niño ingresó al agua con su hermano gemelo, quien logró ser rescatado. Por su parte, Cartagena y San Andrés también se han visto afectados con las inundaciones.
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Según el IDEAM, la tormenta Franklin se dirige hacia el norte, hacia República Dominicana y Haití, y a medida que se aleje va a dejar menos afectaciones a su paso.
Por este motivo, la mayor Rueda dio una serie de recomendaciones para las personas que se encuentran en los territorios más vulnerables a la tormenta. La primera es estar atentos a los posibles desprendimientos de material biológico que puedan alertar de manera temprana un deslizamiento y alertar a las autoridades en caso de que se presente, antes de que sea demasiado tarde.
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En cuanto a las pequeñas embarcaciones en los puertos, lo ideal es permanecer en tierra mientras que pasa la tormenta Franklin, ya que se pueden presentar altas olas que pongan en peligro la vida de los ocupantes.
Asimismo, si bien no se esperan cierres en las playas ni afectaciones para el sector turístico, Rueda sugiere que, en caso de que se presenten precipitaciones, se debe buscar resguardo temporal, ya que las lluvias pueden estar acompañadas de descargas eléctricas y suelen ser pasajeras.
Finalmente, la mayor aseguró que la tormenta Franklin puede considerarse como un simulacro de una emergencia real, que permite evaluar el estado de las viviendas y la identificación de amenazas que puedan poner en riesgo la vida de las personas en caso de que se presente un peligro más grande.
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