Aunque Shakira y Piqué se separaron hace más de un año, todavía tienen cosas que los unen. Además de sus hijos Milan y Sasha, la expareja aún posee en común la mansión en Barcelona que por muchos años fue su vivienda familiar.
Tras su separación, la expareja ha estado intentando vender la casa que habitaron por muchos años junto a los menores y, de acuerdo con el paparazzi Jordi Martin, recientemente han tenido diferencias sobre este tema.
El periodista sostuvo que una fuente cercana a los dos famosos le narró las diferencias que tienen en la actualidad. "Me enteré de que Piqué está presionando a Shakira para que ella acceda a vender la casa", señaló.
Sobre la manera en la que Piqué estaría manipulando a la cantante, según el paparazzi, "me dicen que supuestamente podría tener pruebas que podrían complicar el caso que Shakira tiene con Hacienda en su contra".
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Sin embargo, ahora que Shakira aceptó los cargos por fraude fiscal en uno de sus casos, no se sabe si esas supuestas pruebas de Piqué seguirán funcionando para presionarla.
Además de eso, Shakira y Piqué, según el periodista, "están teniendo problemas por las vacaciones escolares de sus hijos". El español no estaría contento con los arreglos que hizo con la cantante sobre la custodia de Milan y Sasha.
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En noviembre de 2022 Piqué cedió y concedió a Shakira la posibilidad de mudarse con sus hijos a Miami. Gerard Piqué tendría la oportunidad de pasar más tiempo con sus hijos durante las vacaciones, pero también acordaron que tendría 10 días al mes para visitar a sus pequeños en su nuevo hogar.
Jordi Martin, el paparazzi español, ha señalado que tras un año bajo esta dinámica, Piqué quiere tener más tiempo con Milan y Sasha. El español estaría pidiendo que se hagan cambios en el pacto de custodia, pues no está de acuerdo con solo compartir con ellos en las vacaciones y los 10 días mensuales se le dificultan al vivir al otro lado del mundo.
"El arma que tiene Piqué para lograr el cambio en la custodia de los niños es que el acuerdo que ellos firmaron en Barcelona nunca fue ratificado en una corte de Miami. Esto deja un vacío jurídico que el ex de la colombiana quiere aprovechar", aseguró Jordi Martin.