Al mejor jefe del mundo sus empleados le dieron el regalo soñado

Su nombre es Dan Price y es CEO de la compañía Gravity Payments. Se ganó el título del “mejor jefe del mundo” en abril de 2015, cuando rechazó un sueldo de un millón de dólares y, en cambio, subió el de sus empleados hasta 70.000 dólares anuales, algo así como 17,5 millones de pesos mensuales.

En agradecimiento, sus colaboradores decidieron ahorrar durante meses para darle al jefe el regalo con el que soñaba.

El día llegó y Price estalló en llanto con el gesto de sus empleados. Frente a la compañía estaba aparcado un automóvil valorado en 70.000 dólares, unos 210 millones de pesos.

“Nunca imaginé que esto fuera posible. Los empleados de Gravity ahorraron durante seis meses y me regalaron el carro de mis sueños. Un nuevo y espectacular Tesla azul. Sigo en shock. ¿Cómo puedo siquiera decir ‘gracias’?”.

El directivo recuerda que la idea de doblar los sueldos de sus empleados surgió de un estudio publicado por la Universidad de Princeton que aseguraba que para que la gente fuera feliz debería devengar entre 70.000 y 75.000 dólares al año. Y Price se lo tomó muy en serio.

Gravity Payments es una empresa de Seattle (EE.UU.) que se dedica al procesamiento de tarjetas de crédito.

Mr. Bean también juega

Pokémon Go

Mr. Bean

, el famoso personaje interpretado por el actor británico Rowan Atkinson, protagoniza el clip más divertido sobre el videojuego de Nintendo y que este martes estaba a punto de alcanzar 1,3 millones de reproducciones.

Al mejor estilo británico, se pasea por las calles tratando de atrapar pokemones, no sin antes causar estragos a su paso.

El video hace parte de la cuota creativa de jugadores que usaron fragmentos de una de sus películas para poner a Mr. Bean en la onda Pokémon Go.

¿Y dónde está la novia?

Cuando uno cree que no hay nada peor que un novio(a) plantado en el altar, llega un video cuyos protagonistas son una pareja de recién casados que sufre, en plena calle, un accidente.

La escena, grabada en China, muestra cómo la novia que iba en la parte trasera de una motocicleta besa el pavimento luego de pasar por un reductor de velocidad. Lo increíble es que su media naranja al parecer ni se dio cuenta y siguió su marcha.

Ayudada por transeúntes, la novia –vestida y alborotada- dio cuenta que esta historia no tuvo final feliz.