Lo que sería un video casero por poco termina en tragedia. La descarga fulminó una matera y causó daños hasta en el sótano de la casa.
Daniel Modol, de 38 años, capturaba con la cámara de su celular imágenes de una tormenta eléctrica que azotaba la municipalidad de Gjerstad, en el sur de Noruega. Con lo que no contaba, es que uno de los rayos le caería tan cerca.
Menos de cinco metros hicieron la diferencia entre la vida y la muerte para Daniel, que no dejó de grabar pese a la poderosa descarga que ocasionó varios destrozos en su vivienda.
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Con el piso aún humeante, el hombre mostró cómo el rayo acabó con una de las materas que reposaba en su terraza y abrió un hueco en el asfalto.
El hombre salió ileso de milagro.
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