El can de dos años estaba a punto de terminar en un plato de sopa cuando la deportista lo encontró temeroso en una granja.
Meagan Duhamel, patinadora sobre hielo que representa a Canadá en las justas, le dio una nueva oportunidad al tierno Moo-Tea, un perro salchicha.
La canadiense, que se define como vegana y defensora del derecho de los animales, salvó al perro de ser vendido a un restaurante. Además, la mujer, que ya ha ganado una medalla de oro, adoptó al canino.
Frente a la situación, varios atletas occidentales han decidido ir a las granjas donde los crían para rescatarlos antes de que lleguen a los platos de los comensales.
A pesar de las diferencias culturales, la realización de los Juegos Olímpicos de invierno en Corea del Sur ha sido todo un éxito.
Incluso para evitar problemas con los deportistas, el Gobierno pidió que los restaurantes, cercanos a la villa olímpica, que no vendan preparaciones con carne de perro, una práctica rechazada por los países occidentales.El estado prometió dar una contraprestación económica a los lugares que lo hicieran.
La medida no ha tenido una gran acogida, solo 12 establecimientos aceptaron la propuesta.
El consumo de caninos es una práctica muy extendida en Corea, a pesar de que en países vecinos como China lo han prohibido.
Es común encontrar en este país preparaciones como perro asado y bosintang (sopa para la virilidad que contiene este tipo de carne).