El Washington Post informó que un jurado del condado Fairfax ordenó que Tiffany M. Ingham y su clínica paguen al paciente, luego de que se realizara un juicio de tres días. El diario reporta que el paciente encendió la grabadora de audio de su celular antes de que se le realizara la colonoscopia en 2013 y que quedó sorprendido cuando escuchó la grabación, en donde la médica realiza comentarios despectivos.
La demanda especifica que la grabación captó a Ingham, de 42 años, burlándose de la cantidad de anestesia necesaria para sedar al paciente y de realizar comentarios ofensivos sobre un salpullido en el pene.
Uno de los jurados, Farid Khairzada, señaló que no había mucho que objetar, debido a que todo estaba grabado en un audio.