Julie y Kelvin Briggs, adultos mayores de Billingham, Reino Unido, quedaron en 'shock' tras darse cuenta de que el constructor de la extensión de su casa les robó 46.000 libras, alrededor de 220 millones de pesos colombianos.
Jamie Thompson, de 46 años, no completó el trabajo, tomó el dinero y lo gastó en bebidas alcohólicas y drogas. El obrero argumentó que su estado de salud tras la ruptura de su matrimonio lo llevó a consumir esas sustancias.
Según el diario británico The Sun, la pareja se ha visto gravemente perjudicada, pues necesitaba la nueva extensión de su casa para recibir a los padres y al hermano discapacitado de la señora Briggs. Ahora, les costará más de 63.000 libras esterlinas finalizar la obra en menor tiempo, dinero que ellos no pueden pagar.
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La mujer perdió su trabajo debido a la ansiedad y depresión que sufrió a causa de lo sucedido.
La obra empezó en 2017, y Thompson obtuvo el dinero adelantado a través de engaños. La pareja descubrió que nunca se había solicitado la aprobación de la obra cuando él les hizo creer que sí. Aseguran que aunque "una gran parte de la casa quedó habitable" no es suficiente para llevar a sus familiares.
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El constructor ha sido condenado a 13 meses y 2 semanas de prisión, luego de admitir 2 delitos: participación en prácticas comerciales desleales y fraude.
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