La exmodelo Amy Dorris acusó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump , de agredirla sexualmente hace 23 años.
Contó al diario británico The Guardian que el multimillonario republicano la besó y tocó sin su consentimiento, unas acusaciones desmentidas por los abogados del mandatario en el mismo periódico, a menos de siete semanas de las presidenciales.
Noticias relacionadas:
Según Dorris, Trump, que era entonces un promotor inmobiliario y famoso neoyorquino, la agredió el 5 de septiembre de 1997 cerca de los baños de su palco en el US Open, el gran slam estadounidense.
Publicidad
"Me metió la lengua en la garganta mientras lo rechazaba. Entonces me apretó más, puso sus manos sobre mi trasero, mis pechos, mi espalda, todo", dijo Dorris, añadiendo que le había pedido a Trump que parara.
Ella intentó frenarlo mordiéndole la lengua y cree que pudo "hacerle daño".
Publicidad
Él, que tenía 51 años en aquel momento, ignoró su rechazo, precisó. "Estaba atrapada por su abrazo, no podía salir", dijo.
La mujer, que tenía 24 años en el momento de los presuntos hechos, dice que tuvo "náuseas" y que se sintió "ultrajada".
El presidente estadounidense ha sido acusado de agresión o acoso sexual por más de una decena de mujeres, entre ellas una editorialista, E. Jean Carroll, que lo acusa de haberla violado a mediados de los años noventa.
Trump niega todas esas acusaciones. En el caso de E. Jean Carroll, desmintió su denuncia alegando que no era "su tipo de mujer".
Publicidad
Justo antes de las elecciones de 2016, se publicó un video de 2005 del exmagnate inmobiliario en el que se jactaba de poder atrapar a las mujeres por sus genitales gracias a su notoriedad.
La exmodelo, madre de dos gemelas, dice que se planteó hacer pública la agresión en esa época, cuando otras mujeres denunciaron a Trump, pero no lo hizo porque pensó que perjudicaría a su familia.
Publicidad
Ahora, en cambio, siente que quiere ser "una referencia" para sus niñas, quienes, con casi 13 años, deben saber que "no hay que permitir a nadie hacerte nada que no quieras".
"Quiero que vean que no me callé, que confronté a alguien que hizo algo que era inaceptable", afirma Dorris, que conoció al presidente a través de su novio de entonces, Jason Binn, fundador de varias revistas y marcas de lujo.
La exmodelo ha aportado "pruebas" de su versión de los hechos, entre ellas una entrada al torneo de tenis US Open y seis fotos en las que aparece en Nueva York con el magnate inmobiliario, que en esa época estaba casado con su segunda esposa, Marla Maples, explica el diario.
The Guardian agrega que el testimonio de Morris, de 48 años, ha sido corroborado por varias personas a las que ella contó el suceso.
Publicidad
Puede ver: