Galena es una gata que desde hace seis años cuando llegó al hogar de su dueña, Carrie Clark, tiene una actividad favorita.
“Le encanta esconderse en cajas y le encanta jugar dentro de ellas”, contó Carrie.
Pero esa manía, junto con un descuido de su familia, puso en peligro la vida de la gata el 10 de abril de 2024, cuando el esposo de Cay devolvió cinco pares de botas de trabajo que había pedido por Amazon.
“Él fue a buscar cinta y tijeras a otra habitación y Galena debió haberse metido en la caja sin que él lo supiera. Y esas botas son muy pesadas, por lo que cuando ella se metió, él no lo notó”, manifestó Carrie.
Poco después, la familia entró en pánico al percatarse de que Galena, que nunca salía de casa, no estaba por ninguna parte.
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“Pegamos avisos en nuestro barrio. Amigos y familiares rezaban y la buscaban. Revisamos una estación de ferrocarril y revisamos un río cerca de nuestra casa”, complementó Carrie.
Pero, a pesar de los esfuerzos por encontrarla, no había rastro de su amada mascota. Pasó una semana y Carrie estaba perdiendo la esperanza cuando recibió un mensaje de texto que le alertó que alguien había escaneado el microchip que Galena tiene implantado en su espalda.
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“Y a los 30 segundos de recibir ese mensaje, recibí una llamada de una veterinaria y me dijo que Galena estaba sana y salva en California”, aseguró Carrie.
La gata estaba exactamente en Riverside, a más de 1.000 kilómetros de su casa en Lehi, en el estado de Utah.
Galena viajó seis días en la caja sin comida ni agua. La odisea de la resiliente gata es tan increíble que Carrie pidió varias pruebas a la veterinaria para entender lo que había pasado.
“Fue milagroso porque Brandi Hunter, una trabajadora de Amazon, encontró a Galena y la rescató del depósito a devoluciones”, complementó la dueña de la gata.
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Carrie y su esposo viajaron a California para el emotivo reencuentro.
“Fue la cosa más increíble del mundo recuperar a mi gatita, que pensé que no volvería a ver”, aseguró Carrie.
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La familia está completa otra vez. En esta historia, la curiosidad no mató a la gata, solo le gastó una de sus siete vidas.