
Un escabroso crimen se presentó al interior de una vivienda ubicada en el estado de Oklahoma, Estados Unidos, donde, presuntamente, un hombre de 28 años asesinó a su esposa y a sus tres hijos utilizando un arma de fuego, antes de dispararse a sí mismo. El hallazgo fue realizado por el padre de la mujer y abuelo de los niños, quien se comunicó de manera inmediata con la línea de emergencias.
De acuerdo con las autoridades, recibieron un llamado de auxilio alrededor de las 11:30 de la noche del miércoles, 16 de agosto de 2023, por parte de un hombre que acababa de llegar del trabajo a su casa y encontró a cinco miembros de la familia con impactos de bala en la cabeza. Inmediatamente, miembros de la Policía local se dirigieron a la dirección indicada por la persona al otro lado del teléfono y evidenciaron la aterradora escena, que calificaron como "masacre".
Tres de las víctimas fueron declaradas muertas en el lugar, mientras que otras dos, un niño y un hombre adulto que se presume fue el autor del crimen, fueron trasladados de urgencias a un centro asistencial, donde fallecieron poco después de su ingreso.
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El Departamento de Policía de Oklahoma expresó a través de un comunicado que el presunto pistolero fue identificado como Reuben Armendáriz, de 28 años. "La investigación se encuentra en sus primeras etapas y los detectives están tratando de reconstruir la cadena de eventos que condujeron a la masacre", aseguró la institución.
Las víctimas fueron identificadas como Cassandra Flores, de 29 años, y sus hijos Hilary, de 9, Damaris, de 5, y Matías, de 2. Si bien la mujer y el presunto asesino estaban en una relación desde que ella tenía 17 y estaban casados, la investigación arrojó que por el momento se encontraban viviendo en casas separadas.
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Flores vivía con su padre y con los niños en la vivienda donde fueron asesinados. Según las autoridades, Armendáriz le habría disparado a su esposa y a sus hijos dentro de la casa y luego salió hasta el patio delantero, donde acabó con su propia vida.
Una amiga de Flores reveló que en los últimos días, el presunto asesino estaba "realmente deprimido" y obsesionado con su esposa, hasta el punto de preocuparse más por ella que por los niños. Asimismo, aseguró que no esperaba que Armendáriz pudiera hacer algo así: "Simplemente no es real. Nunca esperé eso de Reuben, en absoluto. Siempre estaba tan callado", puntualizó.