Se trata de un ataque aéreo contra objetivos del movimiento islamista en la Franja de Gaza, en represalia por disparos de proyectiles.
Hamas anunció haber cerrado un acuerdo de alto el fuego el sábado por la noche tras importantes bombardeos israelíes contra el enclave palestino.
Sin embargo, el ejército israelí anunció este domingo que desde Gaza se dispararon dos proyectiles contra el territorio israelí sin que se registraran daños ni víctimas.
En total, unos 200 cohetes y obuses de mortero fueron disparados durante el fin de semana contra Israel desde la Franja de Gaza, causando cuatro heridos, indicó un comunicado del ejército israelí.
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Los bombardeos del sábado se cobraron la vida de dos adolescentes gazatíes, de 15 y 16 años, un día después de violentos enfrentamientos en la frontera entre Israel y Gaza en los que murió un joven palestino y cientos de personas resultaron heridas.
Uno de los proyectiles lanzados desde Gaza fue interceptado por el sistema de defensa antiaérea israelí, indicó el ejército en un comunicado.
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Entre otros objetivos, Israel atacó un edificio que sirve de "centro de entrenamiento" al movimiento que gobierna el territorio palestino, según la misma fuente.
El edificio de cinco plantas albergaba en el pasado la biblioteca nacional en Gaza.
"Hamas sigue utilizando infraestructuras civiles para objetivos militares, poniendo en peligro a la población civil," afirma el comunicado del ejército israelí.
Una mediación de Egipto permitió alcanzar un alto el fuego, había un portavoz de Hamas, Fauzi Barhum, en un comunicado.
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Desde el 30 de marzo, el enclave palestino es escenario de protestas contra el bloqueo israelí y por el derecho al regreso de los palestinos a sus tierras de las que huyeron o fueron expulsados con la creación de Israel, en 1948.
En total, los soldados israelíes mataron al menos a 141 palestinos desde que comenzó la movilización.
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Israel y Hamas se libraron tres guerras desde 2008 y desde 2014 mantienen un tenso alto el fuego.