Un cachorro de tigre de dos meses, bajo efecto de sedantes, pretendía ser transportado como una carga cualquiera en México.
Una empresa de correo de Jalisco había empacado en una caja de plástico al animal. Las Fuerzas Federales hicieron la inspección del sospechoso paquete y notaron el contenido en “condiciones poco dignas para el animal.
El hallazgo se puso al descubierto en las redes sociales para advertir que este animal, un tigre de bengala, está en vías de extinción, pues la caza de estos ejemplares es constante por su piel.