En el último día de visita a Israel, el mandatario estadounidense, Barack Obama, llevó flores a las tumbas de líderes palestinos, acompañado por el presidente israelí, Shimon Peres, y el primer ministro de este país, Benjamín Netanyahu.
Luego visitó el museo del holocausto, donde rindió homenaje a las víctimas de los nazis.
El mal tiempo obligó a Obama a viajar por tierra a Belén, donde visitó la iglesia de la Natividad.
Horas después, el presidente viajó a Jordania, donde cientos de miembros del partido comunista protestaron frente a la Embajada de Estados Unidos.