En febrero pasado, la mujer de 30 años tuvo por parto natural a Eva. Esta es su historia.
Revati Bordawekar nació en India y cuando tenía 22 años descubrió que sufría de vaginismo, una afección que provoca espasmos en esa zona del cuerpo e impide utilizar productos como tampones y tener relaciones sexuales, esto debido a que la vagina se cierra.
En 2013, Revati conoció al hombre que más tarde se convertiría en su esposo.
A pesar de que en varias oportunidades quisieron tener intimidad, su situación lo impedía.
Entonces, intentaron con varios tratamientos: aunque médicos le cortaron el himen, la intervención no tuvo los efectos esperados.
Eso no les quitó el sueño de convertirse en padres.
En 2018, probaron con la fertilización in vitro y finalmente recibieron buenas noticias.
"Cuando tuvimos nuestra primera prueba de embarazo positiva, no lo podía creer. Sentía que no era real y lloré de emoción", contó Revati Bordawekar a The Mirror.
Y allí llegó la duda sobre cómo iba a dar a luz teniendo en cuenta su condición.
Para sorpresa de muchos, la mujer de 30 años tuvo un parto natural en febrero pasado. Eva nació sin problemas.
A Revati no le tiembla la voz al reconocer su problema. Lejos de avergonzarse, cuenta su historia para inspirar a otras mujeres que sufren lo mismo.
“El vaginismo es real. No está en tu cabeza y no desaparecerá si te relajas, bebes vino o te lubricas", sostiene.
Finalmente, ella espera que, después de superar este gran reto, la posibilidad de tener relaciones sexuales se vuelva una realidad.