Desde hace algunas semanas se habla de una crisis en la paz total, especialmente después de que el Estado Mayor Central de las disidencias de las FARC dijo que se levantaría de la mesa de negociaciones. Sin embargo, se dio una segunda oportunidad a este grupo armado. Disidencias de las FARC ‘patrullaron’ Caldono en camionetas antes de enfrentarse al EjércitoCamilo González Posso, jefe negociador del Gobierno con el Estado Mayor Central de las disidencias de las FARC, dio su punto de vista respecto a este proceso de negociaciones que adelanta el Gobierno con el grupo ilegal.Posso afirmó que el presidente Gustavo Petro ha sido y es vigilante permanente del proyecto de paz total. "La verdad que yo me he sorprendido por la dedicación y vigilancia que tiene el presidente sobre este proceso, ha sido de manera muy directa. Estamos siguiendo las orientaciones del presidente".Fue este 15 de noviembre cuando el Gobierno decidió darle una segunda oportunidad a la negociación de paz con el Estado Mayor Central de las disidencias de las FARC y anunció la reanudación de los diálogos con el grupo armado ilegal, un proceso marcado por el escepticismo y la desconfianza.Defensoría del Pueblo advierte reclutamiento de menores para la guerra: le envió carta a Petro"Después de dos semanas de la suspensión o receso que decretaron los del Estado Mayor Central para hacer sus consultas y reorganizaciones vamos a retomar las reuniones programadas, particularmente un nuevo ciclo de conversaciones de la mesa de paz", anunció en un video Camilo González Posso.Esta disidencia, incluida en el programa de paz total del presidente Petro, decidió el pasado 5 de noviembre suspender la mesa de diálogos instalada 21 días antes y la agenda pactada debido a desacuerdos con el Gobierno sobre la presencia de militares en las zonas en las que opera la guerrilla, particularmente en el departamento del Cauca.
Tras las elecciones en Bucaramanga 2023, quien sea elegido alcalde tendrá que enfrentar tres temas cruciales, según expertos: seguridad, movilidad y empleo. Conversaciones de país habló con líderes de una ciudad que es su área metropolitana está conformada, además, por tres municipios: Piedecuesta, Floridablanca y Girón.El pastor Jaime Andrés Beltrán lidera intención de voto en Bucaramanga, según encuesta InvamerJohanna Cárdenas, directora de Bucaramanga Metropolitana Cómo Vamos, señaló que en la capital de Santander “el 51% de los encuestados, que tuvimos una encuesta a inicio de este año, considera que las cosas van por mal camino, y casi el 45% no confía en sus vecinos, en el otro, así que consideramos que este es uno de los grandes retos que tenemos todos y es cómo reconstruimos la confianza del tejido social para que entre todos construyamos una mejor ciudad”.Para Cárdenas, “parte de ese rompimiento en la confianza tiene que ver con las condiciones materiales que vivimos en la ciudad; hay indicadores que han venido deteriorándose alrededor de pobreza, seguridad, movilidad, elementos muy básicos que minan esa confianza en las instituciones, en quien debe liderar esos procesos de calidad de vida”.La funcionaria también resaltó que hay tres aspectos que entran al debate a pocas semanas de las elecciones en Bucaramanga: “Uno es la inseguridad, hay una alta percepción de inseguridad en Bucaramanga, alrededor del 60% se siente muy inseguro en la ciudad y esta percepción la respaldan las cifras. A lo que va corrido del año, en 2023 han aumentado en más de 40% los hurtos en los primeros 7 meses y alrededor del 10% los homicidios, así que este es un tema muy álgido que además sobrepasa a Bucaramanga, es un tema país”.“El tema movilidad es un tema álgido, alrededor de 65.000 personas se han salido del sistema de transporte masivo porque no brinda calidad ni conectividad en las diferentes zonas de la ciudad y esto ha hecho que aumenten de manera considerable los vehículos, hay mucho tráfico, mucho trancón, se vuelve muy incómodo movilizarnos por la ciudad y al momento no se han entregado soluciones efectivas para esas personas que requieren un servicio eficiente y de calidad”, dijo sobre el segundo tema.“Y el último es el empleo. Si bien la ciudad tiene un indicador bajo de desempleo, que está alrededor del 9%, y la tasa de ocupación ha mejorado, parte del porqué los ciudadanos posicionan el empleo es porque hay mucha informalidad; alrededor del 50% de la ocupación es informal. Así que cuando a veces sale el DANE a decir que la tasa de desempleo es baja las personas no sienten ese dato como propio y es porque hay mucha economía del rebusque, emprendimientos unipersonales”, añadió.Es algo en lo que coincide Juan Camilo Montoya, rector de la Universidad Autónoma de Bucaramanga -UNAB-, quien además habla de problemas “con la misma Gobernación de Santander, ahí hemos tenido unas rupturas causadas pues por corrientes políticas y situaciones de corrupción en la administración pública que han generado unos lastres fuertes. Entonces tenemos una región que dinámica y económicamente ha mostrado en general menores tasas de desempleo, unos niveles de ingreso per cápita importantes a nivel nacional de competitividad, (…) pero que a la vez también nos venimos frenando en mucha informalidad”.“La inseguridad también ha venido también tomando una preponderancia que ya la habíamos sentido un poco superada y económicamente también nos hace falta mucha más internacionalización, mucha más conexión con el mundo, también anotaría la infraestructura de transporte en la región y la conexión de Bucaramanga con el resto del país hacia el norte, hacia el sur, hacia el oriente, el occidente, han sido lastres y pendientes históricos de esta región”, añadió.