Marino Salgado, José Alejandro Navas, Jorge Enrique Navas, José Felipe Salgado y Ana Milena Aguirre, en libertad, están implicados en el desfalco de libranzas.
Contactaban a personas de escasos recursos, que no cumplían con requisitos para acceder a préstamos, y les cobraban un porcentaje por servir de intermediarios.
Fue tal el descaro de los delincuentes que le advirtieron a su víctima que tuviera cuidado con los ladrones y pidiera la identificación al supuesto funcionario.