En Colombia, una placa duplicada es cauda de comparendos injustos y una deuda millonaria que igual hay que pagar. Detrás de cada multa imposible, hay una historia de alguien que un día descubre que tiene sanciones por infracciones cometidas en lugares donde nunca ha estado.El fenómeno tiene nombre: falsedad marcaria o 'gemeleo de placas'. Y aunque suena técnico, esconde una red criminal silenciosa que fabrica, vende y distribuye placas falsas para motos y carros por todo el país. Según cifras de la Dirección de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional, solo el año pasado 104 conductores fueron sancionados por portar placas adulteradas o duplicadas. En Medellín, las cámaras de fotodetección han identificado hasta 1.500 vehículos al año con irregularidades, desde clonaciones hasta alteraciones del número original.La indignación crece. Las víctimas no solo deben pagar millonarios comparendos, sino enfrentar procesos que duran años para demostrar su inocencia. Un delito invisible que se multiplicaEl gemeleo consiste en copiar la identidad de un vehículo legal —placa, número de chasis y motor— y reproducirla en otro, usualmente robado o sin papeles. Así, el vehículo ilegal circula libremente, mientras el legítimo queda atrapado en un infierno de sanciones.El subintendente Erick León, perito de la Dijín, explica cómo funciona: “Lo que hacen es buscar un vehículo del mismo modelo y marca, para copiar sus sistemas de identificación y regrabarlos en otro vehículo hurtado”. Las placas clonadas sirven para evadir controles, cometer robos o fleteos, y luego desaparecer sin dejar rastro. Detrás, hay fábricas clandestinas, talleres improvisados y una red de tramitadores que se mueven entre la legalidad y el delito.“Yo hago placas falsas”: el negocio desde adentroSéptimo Día habló con 'Cristian' (identidad falsa), quien se presenta como tramitador de placas falsas. Dice que empezó en el negocio de las placas falsas por necesidad y revela la facilidad con la que se puede acceder a una placa ilegal en Colombia.“Les dan el número de placa que quieren sacar, de dónde es la placa, y yo paso los datos al que tiene la maquinaria para hacerla. Él las fabrica en una máquina troqueladora, casi siempre en una casa. Cuando son para un vehículo hurtado, piden también la tarjeta de propiedad. Se sabe que es para gemelear”. Sin embargo, el hombre confiesa que muchos de sus clientes no son precisamente delincuentes, aunque sí reconoce a ladrones y sicarios. “También personas que tienen deudas, impuestos o el carro no está a nombre de ellos. No pueden sacarla directamente a tránsito y buscan esta salida”. Las cifras lo confirman: el gemeleo no solo se sostiene por el crimen organizado, sino por ciudadanos desesperados ante trámites costosos, sanciones automáticas y la falta de claridad institucional.Placas a la venta: el vacío legal que alimenta el delitoEl equipo de Séptimo Día decidió comprobar qué tan fácil era conseguir una placa falsa. Con cámaras ocultas, llegamos a uno de estos comercios como compradores interesados. La respuesta fue inmediata:“Una placa vale 130 mil pesos, las dos por 230 mil. Se demoran un día en entregarlas”, ofreció un vendedor. Cuando se les preguntó si eran legales, respondieron con tranquilidad: “Claro que sí, tenemos permiso del Ministerio de Transporte”. Otra cosa dicen las autoridades. El Secretario de Seguridad de Medellín, Mateo González, fue categórico: “Si no tienen contrato o vínculo con un organismo de tránsito, están incurriendo en una irregularidad y posiblemente en el delito de falsedad marcaria”. Desde Bogotá, el subsecretario de Movilidad, Giovanny Andrés García, coincidió en que esto “no es legal. Ninguna empresa privada puede vender placas. Solo los organismos de tránsito están autorizados para hacerlo”. La confirmación definitiva llegó desde el nivel más alto. La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas Mantilla, lo explicó con una comparación contundente: “Sería como si alguien tuviera la máquina para hacer cédulas como las hace la Registraduría y se parara en una esquina a ofrecer duplicados. Es un delito. Solo los organismos de tránsito pueden comercializar placas en Colombia”.El negocio consultado por los periodistas negó haber cometido irregularidades e intentó justificarse al escuchar las declaraciones de los funcionarios: “Eso es un vacío del Ministerio de Transporte. Ni siquiera los organismos de tránsito pueden afirmar que sea ilegal, porque la máxima autoridad es el ministerio”.Precisamente, la ministra insistió: "Por supuesto que es ilegal. Se trata de falsedad marcaria, un delito que da entre cinco y doce años de cárcel. Solo hay una placa autorizada, la expedida por el organismo de tránsito”.La realidad es que los controles son débiles y la fiscalización mínima. Muchos de estos talleres operan a la vista del público, incluso en zonas comerciales, aprovechando la confusión entre los conductores sobre quién puede emitir una placa legítima.¿Cómo evitar el gemeleo de placas?El Ministerio de Transporte insiste en que solo los organismos oficiales pueden emitir o duplicar placas, y que los ciudadanos deben abstenerse de acudir a talleres o intermediarios. Las autoridades recomiendan:Verificar periódicamente la información del vehículo en el Simit y el RUNT.Denunciar ante la Fiscalía cualquier sospecha de clonación bajo el delito de falsedad marcaria.Solicitar revisión pericial a la Sijín o Dijín si se sospecha que la placa ha sido duplicada.Evitar publicar fotos de la placa en redes sociales.Adquirir placas solo a través del organismo de tránsito correspondiente.
En Colombia, el número de una placa de un vehículo puede convertirse en una sentencia. Cientos de ciudadanos están enfrentando deudas millonarias, procesos judiciales y embargos por infracciones que nunca cometieron. Todo porque alguien, en algún lugar del país, decidió copiar la identidad de su vehículo.Se trata del “gemeleo de placas”, una práctica delictiva cada vez más común que consiste en duplicar la matrícula de un vehículo legítimo y usarla en otro, generalmente robado o sin documentos. Lo que parece una coincidencia administrativa termina siendo un calvario legal para los verdaderos dueños, quienes no solo deben probar su inocencia, sino hacerlo en un sistema lento y desigual.Séptimo Día conoció los casos de Andrés Felipe Bustos y Jhon Elvis Díaz, dos dueños de motos en Bogotá que enfrentan millonarias deudas en Norte de Santander y Antioquia, respectivamente, por fotomultas que supuestamente recibieron sus vehículos, con los cuales ellos aseguran nunca se han movilizado en esos departamentos del país. Ambos enfrentaron embargos, trámites frustrados y una reputación afectada.Una deuda de más de 40 millones de pesosAndrés Felipe Bustos, ingeniero mecánico de 31 años, llegó a creer que la venta de su moto nunca sería posible por una razón insólita: su vehículo aparecía con multas por exceso de velocidad en Villa del Rosario, Norte de Santander, lugar en el que asegura nunca haber estado. El primer comparendo registrado fue el 1° de junio de 2019; a partir de allí, la cadena de notificaciones y sanciones no se detuvo.Ante la sorpresa, consultó en el SIMIT y comprobó que la moto con placas QAA15D acumulaba 21 infracciones, que luego se convirtieron en 51 y terminaron por dejarle una deuda de más de 40 millones de pesos con las autoridades de tránsito de Villa del Rosario. Aunque hizo un derecho de petición explicando que las multas no correspondían a la realidad, pues él no las cometió, le respondieron que igualmente las multas eran válidas y que debía pagarlas. Denunció el hecho ante la Fiscalía General de la Nación, que clasificó su caso como “falsedad marcaria”, un delito con penas de hasta 12 años de prisión. Pero los avances fueron lentos. “La Fiscalía me pidió certificar que mi moto era la original. Lo hice, pero pasaron meses y nada. Yo solo quería que capturaran la moto gemeleada, ya sabían por dónde se movía”, cuenta Andrés.Durante ese tiempo, su vida financiera colapsó: perdió oportunidades laborales, no pudo renovar su licencia ni acceder a créditos. Y como si fuera poco, en 2022 recibió el primero de 12 embargos por esta situación. El inspector de tránsito de Villa del Rosario, Juan Manuel Velásquez Bonilla, reconoció ante el programa Séptimo Día que no tenían información clara sobre este tipo de delitos: “Nosotros no teníamos conocimiento oficial del delito de gemeleo”, admitió.Tras la revisión del caso, 26 de las 51 multas fueron declaradas prescritas, y se espera que las restantes sean anuladas antes de fin de año. Sin embargo, el daño emocional y económico ya está hecho.Una placa clonada a 400 kilómetrosEl caso de Jhon Elvis Díaz, un farmacéutico de 37 años, es similar, pero con un giro más reciente. Su moto, con placas EHL 44F, comenzó a recibir fotomultas desde Antioquia, aunque él vive y trabaja en Bogotá. “Nunca he ido a Medellín, ni a Itagüí, ni a Rionegro", aseguró, pero en cuestión de pocos meses acumuló 10 fotomultas en esos municipios, por un valor que superaba los siete millones de pesos.Todo empezó cuando intentó cambiar de moto y el traspaso fue bloqueado por una sanción en Itagüí. Denunció el hecho ante la Fiscalía por falsedad marcaria. A pesar de eso, las fotomultas siguieron apareciendo. “Uno vive con miedo. Pensé: ¿y si esa moto la usan para un robo o un homicidio? ¿Cómo demuestro que no soy yo?”.Ante la falta de respuesta, Jhon decidió instalar un GPS en su moto para poder probar su ubicación si llegaba otro comparendo. La Fiscalía actuó finalmente en julio de 2025, cuando un perito de Antioquia viajó a Bogotá y certificó que la moto de Jhon era la original. Gracias a eso, la Fiscalía de Rionegro emitió una alerta para ubicar la moto falsa.Pero el tiempo pasaba y el proceso no avanzaba. Por eso, el 15 de septiembre el equipo de Séptimo Día viajó a Rionegro para ver cómo era el proceso de búsqueda de la moto con la misma placa de Jhon. Ese mismo día, las cámaras de seguridad de Rionegro detectaron la moto gemeleada, fue inmovilizada y trasladada a una estación junto a su conductor, el verdadero responsable de las infracciones.Osvaldo Palacio, conductor de la moto con la placa duplicada, aseguró que la compró de buena fe. “Yo no me robé nada. La compré a un comerciante, sin saber que era robada. Me la dieron como parte de pago por ganado”, declaró. La motocicleta fue enviada a la Sijín para un análisis técnico, y Osvaldo quedó vinculado a una investigación por falsedad marcaria. Aunque fue dejado en libertad, el proceso continúa.El subintendente Erick León, perito de la Dijín, explica cómo operan las redes detrás de estos delitos: “Buscan un vehículo del mismo modelo y marca, duplican la placa, el número de chasis y motor. Incluso falsifican la licencia de tránsito”.Para Jhon, el hallazgo de la moto gemeleada fue un alivio. "Ahora sí puedo dormir tranquilo. Necesitábamos ese empujón, porque las autoridades no avanzaban".¿Qué deben tener en cuenta los propietarios de vehículos?El gemeleo de placas no es un hecho aislado. Según expertos en movilidad, estos delitos se facilitan por fallas en los sistemas de control de tránsito, la falta de intercambio de información entre municipios y el mercado negro de autopartes.Los ciudadanos pueden prevenir o reaccionar a tiempo siguiendo estas recomendaciones:Verifique periódicamente su placa en el portal del Simit y el RUNT. Cualquier infracción extraña puede ser una señal de clonación.Denuncie de inmediato ante la Fiscalía por falsedad marcaria si sospecha que su placa fue copiada.Solicite una revisión pericial de su vehículo ante la Dijín o la Sijín para certificar su autenticidad.Evite compartir fotos de su vehículo en redes sociales mostrando la placa. Es una práctica que facilita el gemeleo.Antes de comprar un vehículo usado, verifique su historial legal y técnico con las autoridades de tránsito.
Como cada domingo, Los Informantes comparten con los televidentes tres grandes historias. En esta ocasión, el riesgo en el gremio esmeraldero, donde temen que el narcotráfico esté creando una nueva guerra; la historia de una exitosa científica colombiana que hace algunos años era una joven reguetonera que interpretó uno de los más grandes temas del género urbano y, finalmente, la historia del grupo Cimarrón, un grupo de música llanera que ha agotado escenarios hasta en el continente asiático.La guerra que cambió de colorDurante décadas, las esmeraldas fueron sinónimo de riqueza y orgullo nacional, pero también de guerra y muerte en el occidente de Boyacá. En medio de la llamada guerra verde, miles de personas perdieron la vida hasta que, en 1990, se firmó una tregua promovida por el “zar de las esmeraldas”, Víctor Carranza. Por un tiempo pareció que el negocio se pacificaba, pero las heridas nunca cerraron del todo.Treinta años después, esa vieja guerra ha mutado. Dos asesinatos recientes de empresarios del gremio —Jesús Hernando Sánchez, heredero del clan Carranza, y Juan Sebastián Aguilar, antiguo jefe de seguridad del zar— fueron ejecutados por francotiradores en Bogotá, con precisión quirúrgica. Ambos estaban incluidos en una lista negra que circula desde la cárcel La Picota, supuestamente elaborada por esmeralderos presos y miembros del Clan del Golfo. Los crímenes, según expertos, no responden ya a disputas por minas, sino al control de nuevas rentas criminales donde el narcotráfico se ha infiltrado silenciosamente.En los pueblos mineros, el temor a una nueva ola de violencia crece mientras el Estado intenta mantener la calma. Lo que alguna vez fue una guerra verde ahora se tiñe de blanco: el color de la cocaína que amenaza con volver a ensuciar las piedras más preciadas del país.A ritmo de patentesLa herencia musical de Francisco “Pacho” Galán, creador del merecumbé, encontró una nueva forma de ritmo en su bisnieta Nátaly Galán Freyle. Aunque creció entre acordes de cumbia y merengue, Nátaly eligió un camino distinto: el de la ciencia. Doctora en química aplicada y directora de investigaciones de la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla, hoy es una de las 50 científicas más destacadas de Colombia, con 19 patentes que van desde la detección de explosivos hasta el diagnóstico temprano de enfermedades.Durante años, su investigación se centró en la detección remota de explosivos, un avance que podría servir para desactivar minas antipersona y prevenir atentados. Hoy lidera proyectos que buscan diagnosticar enfermedades como lupus y daño renal mediante muestras simples de orina, además de desarrollar tecnologías que evalúan la calidad del agua y del aire. Para ella, la ciencia no solo debe resolver problemas, sino también contribuir a la paz.Antes de los laboratorios, Nátaly fue rapera y reguetonera. En su adolescencia formó el dúo Las Doncellas, pionero femenino del género urbano en Colombia, con éxitos como 'Tocarte Toa' junto a Big Yamo. Pero los escenarios, marcados por el acoso y la presión de una industria dominada por hombres, la llevaron a elegir otro camino. “Mi bisabuelo mezcló ritmos, yo mezclo nanopartículas”, dice.La casta del LlanoLa música llanera, tan característica y querida por los habitantes de su región, tiene una gran representación a través de Cimarrón, una agrupación con un sonido único, letras diferentes y una voz femenina imponente. Aunque no son profetas en su tierra, se han convertido en el grupo colombiano más reconocido a nivel internacional, siendo la agrupación que más veces ha viajado por el planeta."Hemos tocado en 48 países y hemos repetido", revela Ana Veydó, quien fundó Cimarrón junto a Carlos 'Cuco' Rojas hace 25 años. Carlos fue uno de los artistas musicales llaneros más reconocidos y destacados en el país, pero en medio de su trabajo, el hombre enfermó y falleció en 2020. Un momento muy duro para la cantante que perdió a su pareja y colega artístico.Desde entonces, Ana ha insistido con fuerza en el proyecto que ambos crearon y para ello ha tenido que enfrentar comentarios y creencias machistas, quienes siguen creyendo que Cimarrón alcanzó el éxito por el trabajo de Carlos antes de morir. Con la fuerza de su voz y sus vestidos llamativos, Ana ha domado al toro salvaje y lo ha llevado a nuevos horizontes.
En el Caribe colombiano hay una herencia que suena a trompeta, tambor y alegría. Es la estela musical de Francisco 'Pacho' Galán, el compositor que unió la cumbia y el merengue para inventar el merecumbé, ese ritmo que aún hace bailar a los abuelos y nietos en las fiestas de pueblo. Su bisnieta, Nátaly Galán Freyle, también nació con ese pulso en la sangre, pero en lugar de partituras, su vida se llenó de fórmulas químicas. Y así, donde el maestro mezclaba sonidos, ella aprendió a combinar moléculas.Hoy, con 40 años, es una de las 50 científicas más importantes de Colombia, según la Superintendencia de Industria y Comercio. Química de profesión, doctora en química aplicada y actual directora de investigaciones de la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla, Nátaly ha logrado registrar 19 patentes —17 en Colombia y 2 internacionales— que podrían cambiar la manera en que el país diagnostica enfermedades, detecta explosivos y hasta limpia su medio ambiente.“Mi tesis, por ejemplo, fue de detección a 60 metros de distancia de explosivos en superficies metálicas. Por ejemplo, si tienes un carrobomba y algún terrorista deja huellas o trazas de explosivos, cómo puedes hacer esa detección sin necesidad de que el analista llegue al sitio y sufra algún tipo de accidente”.El resultado de esa investigación fue tan asombroso que le valió reconocimiento internacional. Nátaly descubrió que a través del “ritmo” de las moléculas, podía identificar qué tipo de explosivo había a cierta distancia. Ese hallazgo la llevó a recibir capacitación junto a científicas de todo el mundo, desde Rusia hasta Afganistán, sobre cómo aplicar la química a la paz. “Recibimos toda esa capacitación de cómo desde la química podríamos influir de cierta forma en la paz”, recuerda.La ciencia que puede salvar al país, pero que también la pone en riesgoSu tecnología podría servir para detectar minas antipersona, esas que todavía amenazan los caminos rurales del país. Pero hay algo que la detiene: el miedo. “Yo podría desarrollar esa tecnología, pero parte de ese proceso es validarlo y para eso tienes que ir a campo y hacer eso no es tan seguro en el país”, dice con algo de frustración.Por eso decidió cambiar de campo, literalmente, dejó los explosivos para concentrarse en la detección temprana de enfermedades. Su equipo ha desarrollado biosensores que permiten, a partir de muestras simples como la orina, discriminar si una persona tiene riesgo de lupus o enfermedad renal, incluso antes de que aparezcan los síntomas.Sus patentes combinan espectroscopía, nanobiosensores y análisis por inteligencia artificial. No solo para la salud, también para monitorear la calidad del agua, el suelo y el aire. En todo caso, ciencia aplicada al bienestar, hecha desde el Caribe. “Es increíble que no haya recursos, que no crean en la importancia de lo que hacemos los investigadores”, dice con un dejo de cansancio. “Nosotros podemos investigar, por ejemplo, cómo mejorar los estilos de vida de las personas para que no desencadenen ciertas enfermedades”.De rapera a científicaPocos imaginarían que la doctora Galán, hoy rodeada de tubos de ensayo y microscopios, fue alguna vez una rapera y reguetonera reconocida. En su adolescencia, la champeta y el rap eran su lenguaje natural.“Cuando vivía Cartagena comienzo a escuchar champeta, una música que se llamaba raga, ni siquiera era reguetón y mucho rap en español, que era completamente nuevo”, recuerda. Esa influencia la llevó, junto a su amiga Johana Chartury, estudiante de derecho, a formar el dúo Las Doncellas. Ambas se vestían con ropa ancha y gorras para no desentonar en un género dominado por hombres. De esta manera Nátaly se convirtió en uno de los primeros referentes femeninos del género urbano en el país con canciones como 'Yo no sé' o 'Tú me hechizas', pero sin duda fue con 'Tocarte Toa', junto a Big Yamo, que alcanzó el reconocimiento nacional e internacional. La canción se lanzó en 2008 y fue un hit internacional.“Creo que fue de las épocas más divertidas de mi vida. Yo no lo creía porque mucha gente tampoco creía que nosotros éramos de Cartagena. Nosotros viajamos a Chile, viajamos mucho, en algunos shows tuvimos que salir huyendo porque la gente quería tocarte, quería una foto contigo”, asegura.Y fue precisamente eso último, de lo que no quiso dar muchos detalles, pero lo que terminó por alejarla de la industria musical y llevándola a elegir la ciencia. “Llegó un momento en el que tuve que tomar una decisión. Yo sentía que me gustaba la música, pero sentía que había mucha presión y era difícil. El mundo musical no es tan fácil, menos para una mujer, el ambiente es pesado, hay acoso, pasaron cosas que no eran tan chéveres”.De los ritmos del Caribe a los ritmos molecularesAunque cambió los escenarios por laboratorios, Nátaly no siente que haya renunciado del todo a la música. “La ciencia y la música tienen hilos conductores. Mi bisabuelo mezcló la cumbia y el merengue para crear el merecumbé. Yo mezclo nanopartículas y muestras biológicas para detectar biomoléculas”, explica con naturalidad.Para ella, las moléculas se comportan como notas en una partitura. Quizás por eso su trabajo parece tener ese toque de intuición artística que no se enseña en ninguna universidad. Nátaly Galán ve patrones donde otros ven caos. Escucha melodías donde otros solo perciben ruido.En sus palabras, el laboratorio es su orquesta, y las moléculas, sus instrumentos. “Cada día me convenzo más de que la creatividad es lo que une todo. Es lo que te permite mezclar cosas que parecen imposibles y crear algo nuevo”.A veces, cuando los reactivos burbujean en silencio, recuerda al bisabuelo que compuso canciones para una butifarra o para una novia del barrio, y piensa que, en el fondo, ambos hacen lo mismo: buscar armonía en lo invisible. Y aunque su música ya no suena en radios, su trabajo podría salvar vidas, limpiar ríos y evitar tragedias. Una melodía distinta, pero igual de necesaria.
El municipio de la ciudad de Gaza, con el apoyo del Estado de Catar, comenzó este martes 14 de octubre las obras para retirar los escombros y abrir las calles de la urbe tras la destrucción causada por los bombardeos y las operaciones militares de las fuerzas israelíes en los pasados dos años.En medio del histórico acuerdo de paz en Medio Oriente, el padre Gabriel Romanelli, párroco de la única Iglesia Católica en la Franja, describió en sus redes sociales cómo se vive el cese al fuego y afirmó que el enclave palestino sufrió un tsunami de destrucción. (Lea también: Israel mata a al menos tres palestinos en Gaza, pese al acuerdo de alto al fuego: esto se sabe)“Se escucha un ruido y la gente se altera”El párroco, con quien el difunto papa Francisco hablaba todos los días desde que estalló la guerra de Israel con Hamás, dijo que “llegó el día tan esperado de empezar la implementación del proceso de paz, del acuerdo de paz. Esperemos que, así como comenzó, continúe y haya verdaderamente paz, una justa paz, una permanente paz para todos los habitantes de Tierra Santa”.El padre Romanelli contó que “el ruido de los drones se escucha, pero ya el hecho de no escucharse los bombardeos es un gran bien. El temor de que vuelva a la guerra está, no les voy a decir que no está. No obstante que, a cada momento, sobre todo en las reuniones que llevan adelante distintos líderes, incluidos los líderes de distintos países de Medio Oriente y del mundo, es que podría llegar a pensarse que ya está, que la guerra ya está”.Sin embargo, dice que el optimismo de los palestinos es mesurado. “No es fácil. La gente por ahí nos ve y dice ‘sí, terminó’, como descreídos de todo. Es que no es para menos. Después de tanto tiempo, la memoria y los esquemas mentales recuerdan que, de hecho es así, uno escucha un ruido y uno se sorprende o la gente se altera, ¿no?”, relató. (Lea también: Habla esposa del colombo-israelí liberado por Hamás: "Tengo miedo que no vuelva a ser el mismo")Y mientras el miedo sigue latente, “algunos refugiados de acá comenzaron a ir a lo que quedó de sus casas. Poquito ha quedado en pie, pero todos tienen mucho que hacer. Hoy una señora después de misa me dijo ‘volvimos a casa y está la estructura, gracias a Dios’. Y yo hablaba con ella y me dice ‘sí, padre, nosotros estamos vivos, estamos toda la familia’. Pero quedó la estructura de la casa, aunque igual perdieron algunas paredes, pero bueno, tienen una estructura que quizás puedan recuperar con el paso del tiempo ir a vivir y así otras personas”, dijo el sacerdote, quien afirma que “estamos bien. Siguen con mucha generosidad los responsables, los laicos de los distintos grupos y grupos de trabajo, se sigue distribuyendo la ayuda a distintas personas, al barrio, a otras instituciones cristianas, a los refugiados de aquí, los refugiados también que están en la iglesia ortodoxa”.“Se está ayudando a todos cuanto se pueda, aunque hace falta de todo, verdaderamente de todo, como siempre decimos, porque es la verdad”, finalizó.La reconstrucción de GazaSegún un portavoz gazatí, en declaraciones a la agencia de noticias Sanad -vinculada a Hamás-, el 90% de las calles de la ciudad están completa o parcialmente destrozadas por la guerra en la Franja. La misma fuente indicó que el municipio continúa los trabajos para "abrir 20 avenidas, retirar los escombros y permitir a los desplazados volver en cooperación con la Instancia Árabe Internacional de Reconstrucción en Palestina". Por su parte, el alcalde de Gaza, Yahya al Sarraj, dijo a Sanad que la ciudad sufre "una grave escasez de recursos" para garantizar la plena apertura de las carreteras y facilitar la circulación de los ciudadanos. "No disponemos de repuestos ni materiales de construcción para el mantenimiento de los pozos de agua", indicó. El presidente estadounidense, Donald Trump, y varios líderes árabes firmaron el lunes 13 de octubre un acuerdo que oficializó un alto el fuego que puso fin a dos años de guerra entre Israel y Hamás. El acuerdo contempla la liberación de rehenes, la retirada parcial de las tropas israelíes y la apertura de canales humanitarios para el suministro de alimentos y medicinas. Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este martes desde la capital libanesa, Beirut, que Francia y Egipto organizarán en "las próximas semanas" una conferencia humanitaria para Gaza", cuyo objetivo será "la reanudación duradera de esas operaciones humanitarias y luego la reconstrucción". La reconstrucción de la Franja de Gaza, donde la destrucción es casi completa, requerirá al menos 70.000 millones de dólares, de los cuales 20.000 millones deben ser invertidos en los próximos tres años para hacer viable la vida en este territorio palestino, dijo este martes la ONU.EDITADO POR SANDRA SORIANO SORIANOCOORDINADORA DIGITAL NOTICIAS CARACOLsmsorian@caracoltv.com.co*CON INFORMACIÓN DE AGENCIA EFE
Un accidente fatal se registró en la Troncal del Magdalena Medio, en la población de Rionegro, Santander, luego de que un carro particular se estrellara con un vehículo de servicio intermunicipal. Tres personas, entre ellas un niño de 11 años, fallecieron.Por lo menos nueve personas más resultaron heridas por el choque y fueron trasladadas al centro hospitalario de San Alberto, según ha trascendido. (Lea también: Bus de la agrupación de Samuel Morales, hijo de Kaleth Morales, sufre un accidente de tránsito)¿Qué se sabe sobre el accidente en Santander?El bus accidentado, que estaría afiliado a la empresa Cotaxi, se dirigía a El Banco, en Magdalena, cuando un vehículo particular de color gris chocó de frente con él. Se ha informado que el conductor del carro, al que han identificado como José Darisnel Hernández, falleció en el sitio, así como un niño de 11 años que viajaba con él.Se habla de una mujer, quien sería Saida Milena Castillo, y la cual fue trasladada a un hospital, pero murió en el centro médico.Otras nueve personas resultaron heridas y se está determinando si alguna de ellas se trasladaba en el carro particular siniestrado. Se trata de cinco hombres y cuatro mujeres, entre las que habría dos menores de edad, de 4 y 13 años. La mayor de los niños se encontraría bajo pronóstico reservado.El conductor del bus salió ileso del violento choque, que al parecer se produjo cuando el particular invadió el carril del de transporte intermunicipal, información que no ha sido verificada y que serán las autoridades las que determinen si esa fue la causa del accidente fatal en Santander o si se produjo por otra razón.La parte delantera del vehículo particular quedó totalmente destruida.POR SANDRA SORIANO SORIANOCOORDINADORA DIGITAL NOTICIAS CARACOLsmsorian@caracoltv.com.co
Conéctate al foro "70 años construyendo el desarrollo de los territorios", en el marco del 12° encuentro de proveedores y contratistas de EPM. Una conversación organizada por Foros El Espectador, Caracol Televisión y EPM.
Dos activistas venezolanos exiliados en Colombia fueron víctimas de un atentado armado en el norte de Bogotá este lunes 13 de octubre. Los hechos ocurrieron cuando Luis Alejandro Peche Arteaga, consultor político, y Yendri Omar Velásquez Rodríguez, defensor de derechos humanos y activista LGBTIQ+, fueron atacados con disparos mientras salían del edificio donde residen, en la carrera 19A con calle 134A, en el barrio Cedritos. Peche, por su parte, quedó herido en sus extremidades inferiores, mientras que Velásquez fue impactado en el abdomen. Ambos fueron trasladados a la Clínica Reina Sofía, donde permanecen fuera de peligro.(Lo último: Rastro del carro y arma de sicarios que atentaron contra activistas en Bogotá: revelan detalle clave). De acuerdo con la Policía Metropolitana de Bogotá, el hecho fue perpetrado por hombres que se movilizaban en un vehículo. El coronel Ricardo Chaves, comandante de la Estación de Policía Usaquén, confirmó que “el vehículo que habría participado en los hechos habría salido del mismo inmueble, del mismo edificio, minutos antes del hecho”. Según el oficial, el automóvil fue hallado posteriormente en la localidad de Suba, al norte de la capital. “Dentro de este vehículo fueron halladas las dos pistolas que habrían sido utilizadas para cometer los hechos. Estamos haciendo la trazabilidad para lograr la identificación plena de estas tres personas que al parecer habían participado y se dieron a la fuga”, precisó.Las primeras versiones indican que los agresores dispararon en varias ocasiones, dejando a las víctimas heridas en la calle para luego huir del punto. Imágenes de cámaras de seguridad muestran a dos hombres bajándose del vehículo, disparando frente al edificio y saliendo en cuestión de segundos. En la zona, la Policía activó un plan candado para dar con los responsables, mientras peritos forenses realizan el análisis balístico de las armas encontradas.La Defensoría del Pueblo de Colombia condenó el atentado en su cuenta oficial de X y recordó que Yendri Velásquez se encuentra en el país bajo condición de solicitante de refugio. “Yendri, al igual que muchos otros líderes sociales, acudió a la Defensoría en busca de acompañamiento para su solicitud de protección internacional, luego de huir de su país por persecución”, señaló la entidad. En su comunicado, la Defensoría pidió a la Fiscalía una investigación “pronta y exhaustiva” para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de las víctimas.Por su parte, el dirigente opositor venezolano Leopoldo López calificó el ataque como un ejemplo de “represión transnacional” y lo comparó con el asesinato en Chile del exmilitar venezolano Ronald Ojeda. “Esto no es un hecho aislado. Se trata de un crimen que cruza fronteras, ordenado desde Caracas y ejecutado por el Tren de Aragua”, escribió en su cuenta de X. López también pidió al presidente Gustavo Petro que promueva una investigación a fondo. “La justicia no puede ser selectiva ni la impunidad transnacional. La paz verdadera comienza por proteger a quienes defienden la libertad”, señaló.El pedido de María Corina Machado al presidente de Petro: "La protección"La líder opositora venezolana y ganadora del Premio Nobel de la Paz 2025, María Corina Machado, también se pronunció sobre el ataque. En su cuenta en X, denunció y condenó el atentado, puntualizando que ambos activistas son perseguidos políticos del gobierno de Nicolás Maduro. “Denuncio y condeno el atentado perpetrado este lunes 13 de octubre en Bogotá, Colombia, contra los activistas venezolanos de derechos humanos Yendri Velásquez y Luis Peche, perseguidos en Venezuela por la dictadura de Nicolás Maduro”, escribió.Machado señaló que Yendri Velásquez se encuentra en Colombia bajo condición de refugiado, tras haber escapado de un secuestro en agosto de 2024 por su trabajo como defensor de derechos humanos. “En el caso de Luis Peche, analista político, también se encontraba en Bogotá por persecución política del régimen de Maduro”, añadió. La opositora advirtió que el ataque representa una agresión contra la defensa de los derechos humanos en toda la región y pidió al gobierno colombiano una investigación “exhaustiva, transparente y urgente”.“Le pedimos a las autoridades colombianas y al gobierno del presidente Gustavo Petro una investigación exhaustiva, transparente y urgente que permita esclarecer los hechos, identificar a los responsables y garantizar justicia. Más importante aún, pedimos se garantice la protección para ellos y para los venezolanos exilados en Colombia”, solicitó Machado en su publicación.Su pronunciamiento fue respaldado por organizaciones de derechos humanos venezolanas y por la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), principal coalición opositora del país. Desde España, también se sumó Edmundo González Urrutia, dirigente opositor y excandidato presidencial. Ante las reacciones internacionales, el presidente Gustavo Petro respondió a través de X, destacando que su gobierno mantiene una política de protección a la población venezolana en Colombia. “Toda la ciudadanía venezolana que quiera asilarse en Colombia, independiente de sus ideas, es bien recibida, como se ha demostrado en estos años. Nadie puede decir que el gobierno los ha molestado cuáles quiera sean sus ideas. Se han expresado libremente y así continuará”, escribió el mandatario.Petro añadió que la Unidad Nacional de Protección (UNP) ampliará los esquemas de seguridad para activistas de derechos humanos extranjeros en el país. “La UNP ampliará la protección de los activistas de derechos humanos de cualquier país del mundo en Colombia. Sabemos que buscan los violentos en este caso. Sabemos de la reunión en Cúcuta de las mafias coordinadas. A quienes quieran la paz se les dará la mano, los demás serán enfrentados con contundencia”, señaló el presidente.De acuerdo con la Policía, las investigaciones continúan para identificar a los responsables del atentado, mientras los activistas se recuperan de las heridas. La hipótesis principal apunta a un ataque directo contra los dos venezolanos por su labor política y de defensa de derechos humanos. Las autoridades no descartan que detrás del atentado pueda haber estructuras criminales transnacionales.Horas después del hecho, el consultor político Luis Peche se pronunció en sus redes sociales. A través de X, aseguró que seguirá con su labor a pesar de lo ocurrido. “Hacer política, defender derechos humanos o hasta opinar sobre lo que pasa en Venezuela puede ser causa de asesinato, ya no solo dentro del país. Hoy mi hermano de vida Yendri Velásquez y yo lo vivimos en carne propia. Todavía lo estoy procesando, pero lo más importante es que afortunadamente estamos contándolo. Gracias a todos los que han escrito. No nos detendremos”, escribió.LAURA NATHALIA QUINTERO ARIZA. NOTICIAS CARACOL DIGITAL.
El Ejército israelí mató este martes a al menos tres personas en el barrio de Shujaia de la ciudad de Gaza (norte), confirmó a EFE el Ministerio de Sanidad gazatí, un incidente en el que el Ejército israelí afirmó que se trataba de gazatíes que habían traspasado la "línea amarilla" del acuerdo de alto el fuego.Según Sanidad, se trataba de personas que estaban intentando llegar a sus casas para verificar su estado, tras ser desplazadas de allí por los ataques de Israel para tomar la ciudad de Gaza. El portavoz de la Defensa Civil de la Franja, Mahmud Basal, indicó a EFE que los gazatíes atacados estaban en la calle Sikkeh, muy próxima a la calle Salah al Din que separa el barrio de Shujaia (este de la calle) del de Yabalia (oeste, y donde se encuentra el resto de la ciudad).La denominada "línea amarilla" en el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás marca el punto al que se han retirado las tropas israelíes durante la primera etapa del proceso, que comenzó el pasado viernes. No se ha explicado por dónde discurre exactamente dicha línea y los medios solo han tenido acceso a un mapa muy poco detallado con las líneas de retirada que no hace posible saber sus límites.Según el portavoz de Defensa Civil, esas personas atacadas se encontraban dentro de la zona donde no deberían estar ya las tropas israelíes, y además los disparos, supuestamente hechos desde un dron, impactaron en el hospital Al Ahli, que en este caso sí estaría seguro dentro de dicha zona.En un comunicado, el Ejército israelí dijo que detectó a varias personas "cruzando la línea amarilla y acercándose a las tropas" en el norte de Gaza, lo que calificó como "una violación del acuerdo". "Se intentó distanciar a los sospechosos, pero estos no obedecieron y continuaron acercándose a las tropas, quienes abrieron fuego para eliminar la amenaza", añade la nota, que no detalla cuántos muertos se produjeron en el ataque. Otros medios, como la agencia oficial palestina Wafa, cifran en 6 las personas muertas en el incidente.Comienzan a retiras escombros en GazaEl municipio de la ciudad de Gaza, con el apoyo del Estado de Catar, comenzó este martes las obras para retirar los escombros y abrir las calles de la urbe tras la destrucción causada por los bombardeos y las operaciones militares de las fuerzas israelíes en los pasados dos años. Varias excavadoras partieron esta mañana de los garajes del municipio de la ciudad de Gaza, junto al estadio Al Yarmouk, y se dirigieron hacia las principales calles y carreteras de la ciudad para despejarlas de los escombros, según pudo constatar EFE en el lugar.Según un portavoz del municipio de Gaza, en declaraciones a la agencia de noticias Sanad -vinculada a Hamás-, el 90 % de las calles de la ciudad de Gaza están completa o parcialmente destrozadas por la guerra en la Franja. La misma fuente indicó que el municipio continúa los trabajos para "abrir 20 avenidas, retirar los escombros y permitir a los desplazados volver en cooperación con la Instancia Árabe Internacional de Reconstrucción en Palestina".Por su parte, el alcalde de Gaza, Yahya al Sarraj, dijo a Sanad que la ciudad sufre "una grave escasez de recursos" para garantizar la plena apertura de las carreteras y facilitar la circulación de los ciudadanos. "No disponemos de repuestos ni materiales de construcción para el mantenimiento de los pozos de agua", indicó.EFE