Dijo que, pese a saber que estaba en peligro, supo por dónde agarrar a su familiar para que no le traspasara la descarga eléctrica. Lo logró gracias a lo que aprendió en el colegio.
Dos personas más, un adulto y una menor de 12 años, resultaron heridas y son atendidas en la clínica. Alcalde del municipio reveló que hay 200 damnificados.
Dormían en “colchones podridos y no había baño”, según una de las personas que estuvo recluida ahí. La Defensoría cerró la fundación en Villeta, que rechazó acusaciones de maltrato.
El pequeño, que reside en Villeta, Cundinamarca, inició como activista a los 6 años y sueña con ser astrofísico o político. Esta es su apasionante historia.