Cuatro sospechosos fueron capturados en Christchurch, ciudad donde ocurrieron los hechos. “Es uno de los días más oscuros del país”, dijo la primera ministra.
Una orca golpeó la cámara que usaba uno de los científicos en el mar de Ross, en Nueva Zelanda. El mamífero solo quería divertirse, dijeron tras el susto.
En la Opera House de Sídney, como es costumbre, ofrecieron un espectáculo sinigual de juegos pirotécnicos. En Corea del Norte y Nueva Zelanda hicieron lo propio.
La mitad estaban muertas cuando las hallaron. Las restantes fueron sometidas a eutanasia por la dificultad para reflotarlas. Se trató de un varamiento masivo.