En Colombia, una placa duplicada es cauda de comparendos injustos y una deuda millonaria que igual hay que pagar. Detrás de cada multa imposible, hay una historia de alguien que un día descubre que tiene sanciones por infracciones cometidas en lugares donde nunca ha estado.El fenómeno tiene nombre: falsedad marcaria o 'gemeleo de placas'. Y aunque suena técnico, esconde una red criminal silenciosa que fabrica, vende y distribuye placas falsas para motos y carros por todo el país. Según cifras de la Dirección de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional, solo el año pasado 104 conductores fueron sancionados por portar placas adulteradas o duplicadas. En Medellín, las cámaras de fotodetección han identificado hasta 1.500 vehículos al año con irregularidades, desde clonaciones hasta alteraciones del número original.La indignación crece. Las víctimas no solo deben pagar millonarios comparendos, sino enfrentar procesos que duran años para demostrar su inocencia. Un delito invisible que se multiplicaEl gemeleo consiste en copiar la identidad de un vehículo legal —placa, número de chasis y motor— y reproducirla en otro, usualmente robado o sin papeles. Así, el vehículo ilegal circula libremente, mientras el legítimo queda atrapado en un infierno de sanciones.El subintendente Erick León, perito de la Dijín, explica cómo funciona: “Lo que hacen es buscar un vehículo del mismo modelo y marca, para copiar sus sistemas de identificación y regrabarlos en otro vehículo hurtado”. Las placas clonadas sirven para evadir controles, cometer robos o fleteos, y luego desaparecer sin dejar rastro. Detrás, hay fábricas clandestinas, talleres improvisados y una red de tramitadores que se mueven entre la legalidad y el delito.“Yo hago placas falsas”: el negocio desde adentroSéptimo Día habló con 'Cristian' (identidad falsa), quien se presenta como tramitador de placas falsas. Dice que empezó en el negocio de las placas falsas por necesidad y revela la facilidad con la que se puede acceder a una placa ilegal en Colombia.“Les dan el número de placa que quieren sacar, de dónde es la placa, y yo paso los datos al que tiene la maquinaria para hacerla. Él las fabrica en una máquina troqueladora, casi siempre en una casa. Cuando son para un vehículo hurtado, piden también la tarjeta de propiedad. Se sabe que es para gemelear”. Sin embargo, el hombre confiesa que muchos de sus clientes no son precisamente delincuentes, aunque sí reconoce a ladrones y sicarios. “También personas que tienen deudas, impuestos o el carro no está a nombre de ellos. No pueden sacarla directamente a tránsito y buscan esta salida”. Las cifras lo confirman: el gemeleo no solo se sostiene por el crimen organizado, sino por ciudadanos desesperados ante trámites costosos, sanciones automáticas y la falta de claridad institucional.Placas a la venta: el vacío legal que alimenta el delitoEl equipo de Séptimo Día decidió comprobar qué tan fácil era conseguir una placa falsa. Con cámaras ocultas, llegamos a uno de estos comercios como compradores interesados. La respuesta fue inmediata:“Una placa vale 130 mil pesos, las dos por 230 mil. Se demoran un día en entregarlas”, ofreció un vendedor. Cuando se les preguntó si eran legales, respondieron con tranquilidad: “Claro que sí, tenemos permiso del Ministerio de Transporte”. Otra cosa dicen las autoridades. El Secretario de Seguridad de Medellín, Mateo González, fue categórico: “Si no tienen contrato o vínculo con un organismo de tránsito, están incurriendo en una irregularidad y posiblemente en el delito de falsedad marcaria”. Desde Bogotá, el subsecretario de Movilidad, Giovanny Andrés García, coincidió en que esto “no es legal. Ninguna empresa privada puede vender placas. Solo los organismos de tránsito están autorizados para hacerlo”. La confirmación definitiva llegó desde el nivel más alto. La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas Mantilla, lo explicó con una comparación contundente: “Sería como si alguien tuviera la máquina para hacer cédulas como las hace la Registraduría y se parara en una esquina a ofrecer duplicados. Es un delito. Solo los organismos de tránsito pueden comercializar placas en Colombia”.El negocio consultado por los periodistas negó haber cometido irregularidades e intentó justificarse al escuchar las declaraciones de los funcionarios: “Eso es un vacío del Ministerio de Transporte. Ni siquiera los organismos de tránsito pueden afirmar que sea ilegal, porque la máxima autoridad es el ministerio”.Precisamente, la ministra insistió: "Por supuesto que es ilegal. Se trata de falsedad marcaria, un delito que da entre cinco y doce años de cárcel. Solo hay una placa autorizada, la expedida por el organismo de tránsito”.La realidad es que los controles son débiles y la fiscalización mínima. Muchos de estos talleres operan a la vista del público, incluso en zonas comerciales, aprovechando la confusión entre los conductores sobre quién puede emitir una placa legítima.¿Cómo evitar el gemeleo de placas?El Ministerio de Transporte insiste en que solo los organismos oficiales pueden emitir o duplicar placas, y que los ciudadanos deben abstenerse de acudir a talleres o intermediarios. Las autoridades recomiendan:Verificar periódicamente la información del vehículo en el Simit y el RUNT.Denunciar ante la Fiscalía cualquier sospecha de clonación bajo el delito de falsedad marcaria.Solicitar revisión pericial a la Sijín o Dijín si se sospecha que la placa ha sido duplicada.Evitar publicar fotos de la placa en redes sociales.Adquirir placas solo a través del organismo de tránsito correspondiente.
En Colombia, el número de una placa de un vehículo puede convertirse en una sentencia. Cientos de ciudadanos están enfrentando deudas millonarias, procesos judiciales y embargos por infracciones que nunca cometieron. Todo porque alguien, en algún lugar del país, decidió copiar la identidad de su vehículo.Se trata del “gemeleo de placas”, una práctica delictiva cada vez más común que consiste en duplicar la matrícula de un vehículo legítimo y usarla en otro, generalmente robado o sin documentos. Lo que parece una coincidencia administrativa termina siendo un calvario legal para los verdaderos dueños, quienes no solo deben probar su inocencia, sino hacerlo en un sistema lento y desigual.Séptimo Día conoció los casos de Andrés Felipe Bustos y Jhon Elvis Díaz, dos dueños de motos en Bogotá que enfrentan millonarias deudas en Norte de Santander y Antioquia, respectivamente, por fotomultas que supuestamente recibieron sus vehículos, con los cuales ellos aseguran nunca se han movilizado en esos departamentos del país. Ambos enfrentaron embargos, trámites frustrados y una reputación afectada.Una deuda de más de 40 millones de pesosAndrés Felipe Bustos, ingeniero mecánico de 31 años, llegó a creer que la venta de su moto nunca sería posible por una razón insólita: su vehículo aparecía con multas por exceso de velocidad en Villa del Rosario, Norte de Santander, lugar en el que asegura nunca haber estado. El primer comparendo registrado fue el 1° de junio de 2019; a partir de allí, la cadena de notificaciones y sanciones no se detuvo.Ante la sorpresa, consultó en el SIMIT y comprobó que la moto con placas QAA15D acumulaba 21 infracciones, que luego se convirtieron en 51 y terminaron por dejarle una deuda de más de 40 millones de pesos con las autoridades de tránsito de Villa del Rosario. Aunque hizo un derecho de petición explicando que las multas no correspondían a la realidad, pues él no las cometió, le respondieron que igualmente las multas eran válidas y que debía pagarlas. Denunció el hecho ante la Fiscalía General de la Nación, que clasificó su caso como “falsedad marcaria”, un delito con penas de hasta 12 años de prisión. Pero los avances fueron lentos. “La Fiscalía me pidió certificar que mi moto era la original. Lo hice, pero pasaron meses y nada. Yo solo quería que capturaran la moto gemeleada, ya sabían por dónde se movía”, cuenta Andrés.Durante ese tiempo, su vida financiera colapsó: perdió oportunidades laborales, no pudo renovar su licencia ni acceder a créditos. Y como si fuera poco, en 2022 recibió el primero de 12 embargos por esta situación. El inspector de tránsito de Villa del Rosario, Juan Manuel Velásquez Bonilla, reconoció ante el programa Séptimo Día que no tenían información clara sobre este tipo de delitos: “Nosotros no teníamos conocimiento oficial del delito de gemeleo”, admitió.Tras la revisión del caso, 26 de las 51 multas fueron declaradas prescritas, y se espera que las restantes sean anuladas antes de fin de año. Sin embargo, el daño emocional y económico ya está hecho.Una placa clonada a 400 kilómetrosEl caso de Jhon Elvis Díaz, un farmacéutico de 37 años, es similar, pero con un giro más reciente. Su moto, con placas EHL 44F, comenzó a recibir fotomultas desde Antioquia, aunque él vive y trabaja en Bogotá. “Nunca he ido a Medellín, ni a Itagüí, ni a Rionegro", aseguró, pero en cuestión de pocos meses acumuló 10 fotomultas en esos municipios, por un valor que superaba los siete millones de pesos.Todo empezó cuando intentó cambiar de moto y el traspaso fue bloqueado por una sanción en Itagüí. Denunció el hecho ante la Fiscalía por falsedad marcaria. A pesar de eso, las fotomultas siguieron apareciendo. “Uno vive con miedo. Pensé: ¿y si esa moto la usan para un robo o un homicidio? ¿Cómo demuestro que no soy yo?”.Ante la falta de respuesta, Jhon decidió instalar un GPS en su moto para poder probar su ubicación si llegaba otro comparendo. La Fiscalía actuó finalmente en julio de 2025, cuando un perito de Antioquia viajó a Bogotá y certificó que la moto de Jhon era la original. Gracias a eso, la Fiscalía de Rionegro emitió una alerta para ubicar la moto falsa.Pero el tiempo pasaba y el proceso no avanzaba. Por eso, el 15 de septiembre el equipo de Séptimo Día viajó a Rionegro para ver cómo era el proceso de búsqueda de la moto con la misma placa de Jhon. Ese mismo día, las cámaras de seguridad de Rionegro detectaron la moto gemeleada, fue inmovilizada y trasladada a una estación junto a su conductor, el verdadero responsable de las infracciones.Osvaldo Palacio, conductor de la moto con la placa duplicada, aseguró que la compró de buena fe. “Yo no me robé nada. La compré a un comerciante, sin saber que era robada. Me la dieron como parte de pago por ganado”, declaró. La motocicleta fue enviada a la Sijín para un análisis técnico, y Osvaldo quedó vinculado a una investigación por falsedad marcaria. Aunque fue dejado en libertad, el proceso continúa.El subintendente Erick León, perito de la Dijín, explica cómo operan las redes detrás de estos delitos: “Buscan un vehículo del mismo modelo y marca, duplican la placa, el número de chasis y motor. Incluso falsifican la licencia de tránsito”.Para Jhon, el hallazgo de la moto gemeleada fue un alivio. "Ahora sí puedo dormir tranquilo. Necesitábamos ese empujón, porque las autoridades no avanzaban".¿Qué deben tener en cuenta los propietarios de vehículos?El gemeleo de placas no es un hecho aislado. Según expertos en movilidad, estos delitos se facilitan por fallas en los sistemas de control de tránsito, la falta de intercambio de información entre municipios y el mercado negro de autopartes.Los ciudadanos pueden prevenir o reaccionar a tiempo siguiendo estas recomendaciones:Verifique periódicamente su placa en el portal del Simit y el RUNT. Cualquier infracción extraña puede ser una señal de clonación.Denuncie de inmediato ante la Fiscalía por falsedad marcaria si sospecha que su placa fue copiada.Solicite una revisión pericial de su vehículo ante la Dijín o la Sijín para certificar su autenticidad.Evite compartir fotos de su vehículo en redes sociales mostrando la placa. Es una práctica que facilita el gemeleo.Antes de comprar un vehículo usado, verifique su historial legal y técnico con las autoridades de tránsito.
Como cada domingo, Los Informantes comparten con los televidentes tres grandes historias. En esta ocasión, el riesgo en el gremio esmeraldero, donde temen que el narcotráfico esté creando una nueva guerra; la historia de una exitosa científica colombiana que hace algunos años era una joven reguetonera que interpretó uno de los más grandes temas del género urbano y, finalmente, la historia del grupo Cimarrón, un grupo de música llanera que ha agotado escenarios hasta en el continente asiático.La guerra que cambió de colorDurante décadas, las esmeraldas fueron sinónimo de riqueza y orgullo nacional, pero también de guerra y muerte en el occidente de Boyacá. En medio de la llamada guerra verde, miles de personas perdieron la vida hasta que, en 1990, se firmó una tregua promovida por el “zar de las esmeraldas”, Víctor Carranza. Por un tiempo pareció que el negocio se pacificaba, pero las heridas nunca cerraron del todo.Treinta años después, esa vieja guerra ha mutado. Dos asesinatos recientes de empresarios del gremio —Jesús Hernando Sánchez, heredero del clan Carranza, y Juan Sebastián Aguilar, antiguo jefe de seguridad del zar— fueron ejecutados por francotiradores en Bogotá, con precisión quirúrgica. Ambos estaban incluidos en una lista negra que circula desde la cárcel La Picota, supuestamente elaborada por esmeralderos presos y miembros del Clan del Golfo. Los crímenes, según expertos, no responden ya a disputas por minas, sino al control de nuevas rentas criminales donde el narcotráfico se ha infiltrado silenciosamente.En los pueblos mineros, el temor a una nueva ola de violencia crece mientras el Estado intenta mantener la calma. Lo que alguna vez fue una guerra verde ahora se tiñe de blanco: el color de la cocaína que amenaza con volver a ensuciar las piedras más preciadas del país.A ritmo de patentesLa herencia musical de Francisco “Pacho” Galán, creador del merecumbé, encontró una nueva forma de ritmo en su bisnieta Nátaly Galán Freyle. Aunque creció entre acordes de cumbia y merengue, Nátaly eligió un camino distinto: el de la ciencia. Doctora en química aplicada y directora de investigaciones de la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla, hoy es una de las 50 científicas más destacadas de Colombia, con 19 patentes que van desde la detección de explosivos hasta el diagnóstico temprano de enfermedades.Durante años, su investigación se centró en la detección remota de explosivos, un avance que podría servir para desactivar minas antipersona y prevenir atentados. Hoy lidera proyectos que buscan diagnosticar enfermedades como lupus y daño renal mediante muestras simples de orina, además de desarrollar tecnologías que evalúan la calidad del agua y del aire. Para ella, la ciencia no solo debe resolver problemas, sino también contribuir a la paz.Antes de los laboratorios, Nátaly fue rapera y reguetonera. En su adolescencia formó el dúo Las Doncellas, pionero femenino del género urbano en Colombia, con éxitos como 'Tocarte Toa' junto a Big Yamo. Pero los escenarios, marcados por el acoso y la presión de una industria dominada por hombres, la llevaron a elegir otro camino. “Mi bisabuelo mezcló ritmos, yo mezclo nanopartículas”, dice.La casta del LlanoLa música llanera, tan característica y querida por los habitantes de su región, tiene una gran representación a través de Cimarrón, una agrupación con un sonido único, letras diferentes y una voz femenina imponente. Aunque no son profetas en su tierra, se han convertido en el grupo colombiano más reconocido a nivel internacional, siendo la agrupación que más veces ha viajado por el planeta."Hemos tocado en 48 países y hemos repetido", revela Ana Veydó, quien fundó Cimarrón junto a Carlos 'Cuco' Rojas hace 25 años. Carlos fue uno de los artistas musicales llaneros más reconocidos y destacados en el país, pero en medio de su trabajo, el hombre enfermó y falleció en 2020. Un momento muy duro para la cantante que perdió a su pareja y colega artístico.Desde entonces, Ana ha insistido con fuerza en el proyecto que ambos crearon y para ello ha tenido que enfrentar comentarios y creencias machistas, quienes siguen creyendo que Cimarrón alcanzó el éxito por el trabajo de Carlos antes de morir. Con la fuerza de su voz y sus vestidos llamativos, Ana ha domado al toro salvaje y lo ha llevado a nuevos horizontes.
En el Caribe colombiano hay una herencia que suena a trompeta, tambor y alegría. Es la estela musical de Francisco 'Pacho' Galán, el compositor que unió la cumbia y el merengue para inventar el merecumbé, ese ritmo que aún hace bailar a los abuelos y nietos en las fiestas de pueblo. Su bisnieta, Nátaly Galán Freyle, también nació con ese pulso en la sangre, pero en lugar de partituras, su vida se llenó de fórmulas químicas. Y así, donde el maestro mezclaba sonidos, ella aprendió a combinar moléculas.Hoy, con 40 años, es una de las 50 científicas más importantes de Colombia, según la Superintendencia de Industria y Comercio. Química de profesión, doctora en química aplicada y actual directora de investigaciones de la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla, Nátaly ha logrado registrar 19 patentes —17 en Colombia y 2 internacionales— que podrían cambiar la manera en que el país diagnostica enfermedades, detecta explosivos y hasta limpia su medio ambiente.“Mi tesis, por ejemplo, fue de detección a 60 metros de distancia de explosivos en superficies metálicas. Por ejemplo, si tienes un carrobomba y algún terrorista deja huellas o trazas de explosivos, cómo puedes hacer esa detección sin necesidad de que el analista llegue al sitio y sufra algún tipo de accidente”.El resultado de esa investigación fue tan asombroso que le valió reconocimiento internacional. Nátaly descubrió que a través del “ritmo” de las moléculas, podía identificar qué tipo de explosivo había a cierta distancia. Ese hallazgo la llevó a recibir capacitación junto a científicas de todo el mundo, desde Rusia hasta Afganistán, sobre cómo aplicar la química a la paz. “Recibimos toda esa capacitación de cómo desde la química podríamos influir de cierta forma en la paz”, recuerda.La ciencia que puede salvar al país, pero que también la pone en riesgoSu tecnología podría servir para detectar minas antipersona, esas que todavía amenazan los caminos rurales del país. Pero hay algo que la detiene: el miedo. “Yo podría desarrollar esa tecnología, pero parte de ese proceso es validarlo y para eso tienes que ir a campo y hacer eso no es tan seguro en el país”, dice con algo de frustración.Por eso decidió cambiar de campo, literalmente, dejó los explosivos para concentrarse en la detección temprana de enfermedades. Su equipo ha desarrollado biosensores que permiten, a partir de muestras simples como la orina, discriminar si una persona tiene riesgo de lupus o enfermedad renal, incluso antes de que aparezcan los síntomas.Sus patentes combinan espectroscopía, nanobiosensores y análisis por inteligencia artificial. No solo para la salud, también para monitorear la calidad del agua, el suelo y el aire. En todo caso, ciencia aplicada al bienestar, hecha desde el Caribe. “Es increíble que no haya recursos, que no crean en la importancia de lo que hacemos los investigadores”, dice con un dejo de cansancio. “Nosotros podemos investigar, por ejemplo, cómo mejorar los estilos de vida de las personas para que no desencadenen ciertas enfermedades”.De rapera a científicaPocos imaginarían que la doctora Galán, hoy rodeada de tubos de ensayo y microscopios, fue alguna vez una rapera y reguetonera reconocida. En su adolescencia, la champeta y el rap eran su lenguaje natural.“Cuando vivía Cartagena comienzo a escuchar champeta, una música que se llamaba raga, ni siquiera era reguetón y mucho rap en español, que era completamente nuevo”, recuerda. Esa influencia la llevó, junto a su amiga Johana Chartury, estudiante de derecho, a formar el dúo Las Doncellas. Ambas se vestían con ropa ancha y gorras para no desentonar en un género dominado por hombres. De esta manera Nátaly se convirtió en uno de los primeros referentes femeninos del género urbano en el país con canciones como 'Yo no sé' o 'Tú me hechizas', pero sin duda fue con 'Tocarte Toa', junto a Big Yamo, que alcanzó el reconocimiento nacional e internacional. La canción se lanzó en 2008 y fue un hit internacional.“Creo que fue de las épocas más divertidas de mi vida. Yo no lo creía porque mucha gente tampoco creía que nosotros éramos de Cartagena. Nosotros viajamos a Chile, viajamos mucho, en algunos shows tuvimos que salir huyendo porque la gente quería tocarte, quería una foto contigo”, asegura.Y fue precisamente eso último, de lo que no quiso dar muchos detalles, pero lo que terminó por alejarla de la industria musical y llevándola a elegir la ciencia. “Llegó un momento en el que tuve que tomar una decisión. Yo sentía que me gustaba la música, pero sentía que había mucha presión y era difícil. El mundo musical no es tan fácil, menos para una mujer, el ambiente es pesado, hay acoso, pasaron cosas que no eran tan chéveres”.De los ritmos del Caribe a los ritmos molecularesAunque cambió los escenarios por laboratorios, Nátaly no siente que haya renunciado del todo a la música. “La ciencia y la música tienen hilos conductores. Mi bisabuelo mezcló la cumbia y el merengue para crear el merecumbé. Yo mezclo nanopartículas y muestras biológicas para detectar biomoléculas”, explica con naturalidad.Para ella, las moléculas se comportan como notas en una partitura. Quizás por eso su trabajo parece tener ese toque de intuición artística que no se enseña en ninguna universidad. Nátaly Galán ve patrones donde otros ven caos. Escucha melodías donde otros solo perciben ruido.En sus palabras, el laboratorio es su orquesta, y las moléculas, sus instrumentos. “Cada día me convenzo más de que la creatividad es lo que une todo. Es lo que te permite mezclar cosas que parecen imposibles y crear algo nuevo”.A veces, cuando los reactivos burbujean en silencio, recuerda al bisabuelo que compuso canciones para una butifarra o para una novia del barrio, y piensa que, en el fondo, ambos hacen lo mismo: buscar armonía en lo invisible. Y aunque su música ya no suena en radios, su trabajo podría salvar vidas, limpiar ríos y evitar tragedias. Una melodía distinta, pero igual de necesaria.
Canadá se enfrenta el martes a Colombia en un partido amistoso en el estadio Sports Illustrated de Harrison (EE. UU.) con la intención de "estar a la altura de las circunstancias" y mejorar la imagen dada el viernes cuando la selección canadiense perdió por 0-1 ante Australia.La derrota del viernes, en un partido que los canadienses dominaron y que perdieron por un error defensivo, es la única desde junio, cuando el equipo norteamericano fue superado por Guatemala en la tanda de los penaltis tras empatar 1-1 al término del tiempo reglamentario.Tras el partido, el portero de la selección canadiense Maxime Crépeau declaró que era una oportunidad para aprender.Mientras, el seleccionador Jesse Marsch explicó que estaba “ilusionado” con que sus jugadores tengan la oportunidad de enfrentarse a una formación de la calidad de Colombia, que el sábado goleó a México por 0-4 en Texas."Necesitamos ponernos en este tipo de partidos y necesitamos estar a la altura de las circunstancias. Y sé que lo haremos. Va a ser un partido difícil, no sé si ganaremos, pero vamos a jugar bien", explicó el seleccionador canadiense a la televisión canadiense 'TSN'.El partido del martes es parte de la preparación de los canadienses y los colombianos de cara al Mundial 2026.Canadá será anfitrión de este torneo junto a Estados Unidos y México.Será la cuarta vez que el combinado nacional canadiense se enfrenta al de Colombia. En 1988 y 2014, Canadá cayó ante los cafeteros en sendos amistosos.Pero la selección de Marsch prefiere recordar la histórica victoria por 2-0 que consiguieron sobre Colombia en la final de la Copa Oro de la Concacaf en 2000.En junio, cuando se anunció el amistoso, Marsch ya señaló que su equipo quería "enfrentarse a más rivales sudamericanos"."Colombia es el tipo de oponente de alto nivel contra el que queremos competir mientras continuamos nuestra preparación para el próximo Mundial", añadió.El amistoso es el cuarto que la selección canadiense, que está clasificada de forma automática para el Mundial 2026 al ser uno de los organizadores de la competición, disputa en las últimas semanas.El 5 de septiembre, los canadienses se impusieron por 0-3 a Rumania en Bucarest y cuatro días después ganaron a Gales 0-1 en Swansea (Reino Unido).
El 13 de octubre de 2025 quedará marcado como uno de los días más emotivos en la historia reciente de Israel. Tras más de dos años de cautiverio en Gaza, 20 rehenes israelíes fueron liberados por Hamás como parte de un acuerdo de paz mediado por Estados Unidos, Egipto y Catar. Las imágenes del reencuentro con sus familias, cargadas de lágrimas, abrazos y gritos de alegría, recorrieron el mundo y se convirtieron en símbolo de esperanza en medio de un conflicto que ha dejado miles de muertos y heridas profundas.Los rehenes fueron secuestrados el 7 de octubre de 2023, durante el ataque de Hamás al festival Nova y a varios kibutz en el sur de Israel. Desde entonces, sus familias vivieron en una incertidumbre constante, sin saber si sus seres queridos estaban vivos, en qué condiciones se encontraban o si algún día volverían a verlos.La liberación se produjo tras 738 días de cautiverio. La Cruz Roja Internacional fue la encargada de recibir a los rehenes en distintos puntos de Gaza y trasladarlos a territorio israelí, donde fueron recibidos por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y llevados a hospitales para chequeos médicos antes de reencontrarse con sus familias.El reencuentro entre los rehenes y sus familias: lágrimas, abrazos y alivioLas escenas del reencuentro fueron profundamente conmovedoras. En la base militar de Reim, cerca de la frontera con Gaza, padres, madres, hermanos e hijos esperaban ansiosos la llegada de los liberados. Cuando finalmente se vieron, el silencio se rompió con gritos de alegría, sollozos y abrazos que parecían no querer terminar.Uno de los momentos más emotivos fue el reencuentro de Eitan Mor, de 25 años, con sus padres. Eitan fue secuestrado mientras trabajaba como guardia en el festival Supernova. Su padre, envuelto en una bandera israelí, lo abrazó con fuerza, mientras su madre se unía al abrazo entre lágrimas. “Nunca perdimos la fe, pero no sabíamos si volveríamos a abrazarlo”, confesó su madre. [lasexta.com]También se vivió un momento especial con los hermanos gemelos Gali y Ziv Berman, quienes fueron secuestrados por separado y mantenidos en cautiverio sin contacto entre ellos. Al reencontrarse, se fundieron en un abrazo que cruzó meses de incertidumbre. Ambos vestían camisetas del Maccabi Tel Aviv, su equipo de fútbol favorito, como símbolo de la vida que les fue arrebatada y que ahora intentan recuperar.Sin duda, entre los 20 rehenes liberados por Hamás, uno de los casos que más conmovió a Colombia e Israel fue el de Elkana Bohbot, productor del festival Nova y ciudadano colombo-israelí. Su secuestro, ocurrido el 7 de octubre de 2023, se convirtió en uno de los más visibilizados internacionalmente, gracias a la incansable campaña de su esposa, Rebecca González, una colombiana que nunca dejó de luchar por su liberación.Durante los 738 días de cautiverio, Rebecca mantuvo viva la esperanza. En febrero de 2024, recibió una prueba de vida gracias a otro rehén liberado, Ohad Ben Ami. Luego, en mayo, Hamás difundió un video donde Elkana aparecía visiblemente debilitado, tumbado bajo una manta. A pesar de la angustia, Rebecca siguió adelante, decorando la habitación donde soñaba recibirlo, con dibujos hechos por su hijo y regalos que esperaban el regreso del padre ausente.El día de la liberación, Rebecca llegó temprano al hospital Tel Hashomer, en Tel Aviv, donde Elkana sería atendido. La primera comunicación entre ellos fue una videollamada breve pero poderosa. “Mi amor, te amo”, le dijo ella entre lágrimas, en una frase que se viralizó como símbolo del amor que resiste incluso el cautiverio. En redes sociales se hizo viral la primera fotografía de esta tierna pareja colombo-israelí.El presidente Gustavo Petro, quien le otorgó la nacionalidad colombiana en noviembre de 2023 como gesto humanitario, celebró la liberación: “Esperamos que Elkana se reúna con su familia y luego venga a Colombia. Aquí lo recibiremos con el amor del pueblo colombiano”. ÁNGELA URREA PARRANOTICIAS CARACOL
Luego de la aplastante victoria 4-0 sobre México, la Selección Colombia continúa su preparación rumbo a la Copa del Mundo de 2026, que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá. El equipo dirigido por Néstor Lorenzo atraviesa un gran momento futbolístico y busca mantener su racha positiva en el cierre de esta doble fecha FIFA.El conjunto ‘cafetero’ llega con confianza tras un partido redondo en el que brillaron figuras como Luis Díaz, Jefferson Lerma y James Rodríguez, quienes fueron claves en la contundente goleada sobre el ‘tri’. Ahora, el objetivo es repetir una actuación sólida ante otro de los anfitriones del próximo Mundial: Canadá.Colombia vs. Canadá EN VIVO, hora y dónde ver EN VIVO Fecha: miércoles 15 de octubre de 2025Hora: 7:00 p. m. (hora colombiana)Estadio: Red Bull Arena (New Jersey, Estados Unidos)Transmisión: Gol Caracol (señal principal de Caracol Televisión) y Ditu.Será un duelo interesante entre dos selecciones que compartirán protagonismo en la próxima Copa del Mundo, ambas en busca de afinar detalles y sumar confianza de cara al gran objetivo de 2026.¿Cómo llega Canadá para este partido?El seleccionado canadiense, dirigido por Jesse Marsch, viene de caer 1-0 ante Australia en su más reciente presentación, en un duelo en el que el tanto de Nestory Irankunda marcó la diferencia. La última vez que Colombia y Canadá se enfrentaron fue el 14 de octubre de 2014, en un amistoso disputado en Nueva Jersey, con triunfo 1-0 para la ‘tricolor’ gracias a un gol de James Rodríguez.En el historial general, ambos combinados se han enfrentado en cuatro ocasiones, con saldo favorable para Colombia: dos victorias, un empate y una derrota. El único triunfo canadiense fue en la final de la Copa Oro 2000, donde se impuso 2-0.Este nuevo encuentro será una prueba importante para ambas selecciones, que buscan afinar su camino hacia el Mundial 2026.
La Selección Colombia ya pasó la página de la vibrante victoria 3-2 sobre España por los cuartos de final del Mundial Sub-20 que se disputa en Chile. El conjunto dirigido por César Torres se prepara ahora para afrontar una nueva cita con la historia, en busca de su primera Copa del Mundo en esta categoría.Por segunda vez en su historia, la ‘tricolor’ alcanza las semifinales del torneo juvenil, igualando el registro de 2003 en Emiratos Árabes Unidos, cuando el equipo era dirigido por Reinaldo Rueda. En esa ocasión, Colombia terminó tercera tras vencer a Argentina. Ahora, el reto será aún mayor: superar a la selección más ganadora del certamen, con seis títulos en sus vitrinas.El rival será Argentina, dirigida por Diego Placente, que regresó a una semifinal después de 18 años y llega motivada tras su sólido triunfo sobre México. El choque entre ambos equipos promete ser uno de los más atractivos del campeonato por el buen momento que atraviesan y el talento joven que exhiben.Lionel Messi felicitó a figura de ArgentinaLos dirigidos por Placente se impusieron 2-0 a México en el Estadio Nacional de Santiago gracias a las anotaciones de Maher Carrizo y Mateo Silvetti. El pase a semifinales no pasó desapercibido para Lionel Messi, capitán de la selección absoluta y referente máximo del fútbol argentino.A través de un comentario en Instagram, el astro del Inter Miami expresó su alegría por el logro de la Sub-20 y envió un mensaje especial al autor de uno de los goles.“Felicitaciones chicos por el pase a semis!! Y felicitaciones @toto.silvetti por el gol!!”, escribió el siete veces ganador del Balón de Oro, generando una ola de reacciones entre los fanáticos y los propios jugadores juveniles, que celebraron el gesto de su ídolo.¿Cuándo se juega la semifinal del Mundial Sub-20?El miércoles 15 de octubre se conocerán los finalistas del certamen. A las 3:00 p. m. (hora colombiana), Marruecos se enfrentará a Francia en el Estadio Elías Figueroa de Valparaíso, mientras que a las 6:00 p. m., Colombia medirá fuerzas con Argentina en el Estadio Nacional de Santiago.Será la segunda vez que ambos equipos se enfrenten en una Copa del Mundo Sub-20. En 2003, Colombia venció 2-1 a la ‘albiceleste’ en el duelo por el tercer lugar, con goles de Erwin Carrillo y Jaime Castrillón.
La Selección Colombia tuvo un partido redondo frente a México, al que goleó 4-0 gracias a las anotaciones de Jhon Lucumí, Luis Díaz, Jefferson Lerma y Johan Carbonero. El abultado resultado dejó muy mal parado a Javier Aguirre y a sus dirigidos por el nivel mostrado frente a la ‘tricolor’ en Texas.La dura caída sigue generando eco en el país azteca, en donde hay preocupación, teniendo en cuenta que la Copa del Mundo 2026, de la que es uno de los anfitriones junto a Canadá y Estados Unidos, está a la vuelta de la esquina.El ‘tri’ ya se encuentra en México, donde espera pasar el trago amargo de la derrota frente a Colombia y calmar los ánimos de la prensa local, que no perdona.La prensa le sigue dando ‘palo’ a la Selección de MéxicoEl 4-0 ante Colombia caló hondo en los mexicanos, y es que no solo es una derrota más. Los ‘manitos’ acumulan 15 años sin vencer al combinado ‘cafetero’, al que derrotaron por última vez en 2010.El portal deportivo ‘Mediotiempo’, uno de los más influyentes de ese país, tituló: “México recuperó fuerza en Concacaf, pero fuera de la zona es un rival frágil y modesto”.Dentro del artículo, el medio citado apuntó que los dirigidos por Javier Aguirre no tienen nivel para jugar con otros seleccionados distintos a los de su confederación. El fragmento textual decía:“La derrota por goleada de 4-0 que le propinó Colombia es solo una muestra de que este equipo no está preparado para jugar ante equipos que no sean de la Concacaf, y es que dentro del área, el Tri recuperó el mote de gigante, pero fuera de ella se está comportando de manera opuesta”.Desde que tomó las riendas de la selección mexicana, Javier Aguirre ha dirigido 18 partidos, de los cuales seis han sido contra rivales fuera de la Concacaf, con un registro de dos victorias (sobre Nueva Zelanda y Turquía) y dos derrotas abultadas con seleccionados fuera de su asociación (Colombia 4-0 y Suiza 4-2).En lo que resta del año, México se medirá con Ecuador, Uruguay y Paraguay, rivales que pondrán a prueba una vez más al ‘Tri’.Por su parte, el próximo examen de Colombia será frente a Canadá, el próximo miércoles 15 de octubre, desde las 7:00 p. m. en el Red Bull Arena de New York.