Una detonación en cercanías a una mina de carbón en Landázuri, Santander, provocó la emergencia. Los menores usaban gasolina para cazar un armadillo.
Jeison y David Castañeda, de 14 y 17 años respectivamente, fueron trasladados a Bucaramanga tras la emergencia, pero el mayor de ellos no sobrevivió.
Horas antes de fallecer, David contó que buscaban cazar un armadillo utilizando gasolina para incendiar su madriguera.
“David rescató, de alguna manera, a su hermano. Fue el que tuvo las fuerzas para sacarlo del lugar donde se produjeron los hechos”, afirmó Tatiana Hernández, familiar de las víctimas.
Ahora, Jeison se debate entre la vida y la muerte.
“Está en estado crítico; las quemaduras son de segundo y tercer grado con compromiso del 75% de la superficie corporal y con afectación de la vía aérea”, explicó Carlos Ramírez, coordinador de la unidad de quemados del Hospital de Santander.
Se investiga si gases provenientes de una mina ilegal en el sector habrían ocasionado la explosión, pues los jóvenes tenían partículas de carbón en el cuerpo.