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La Policía descarta que la muerte de Jhonny Ramos, en el barrio Comuneros, esté relacionada con un hurto.
El cuerpo sin vida del sacerdote fue encontrado en la casa cural. Estaba atado de pies y manos.
“Al parecer, con un golpe contundente en la cabeza. No presenta lesiones de arma de fuego ni de arma blanca”, explicó el coronel Clauder Cardona, subcomandante de la Policía en la capital del Meta.
Las autoridades creen que no se trató de un hurto. En su poder tienen ya videos de cámaras de seguridad para identificar a los responsables.
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“En la casa cural no se ve que se haya forcejeado la chapa, lo que nos determina que la persona que ingresó, o ingresó con consentimiento de el padre o que tenía una llave maestra”, agregó el alto oficial.
La comunidad religiosa rechaza el asesinato de su líder espiritual.
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“Pedimos por la conversión de esos asesinos y rechazamos rotundamente toda forma de violencia que atente contra la vida y la dignidad de las personas”, señaló, por su parte, William Prieto, vicario de la Arquidiócesis de Villavicencio.
En consejo de seguridad, la Policía ofreció hasta diez millones de pesos de recompensa para quien entregue información que permita capturar a los homicidas.
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