La Defensoría del Espacio Público de Bogotá trabaja casi todas las noches para restaurar los letreros del SITP dañados por vándalos o robados por supuestos recicladores, que venden las láminas de acero al mejor postor.
Alejandra Rodríguez, directora de la entidad, dice que hasta el momento se han reinstalado 1.090 avisos.
“Hay que excavar hasta 60 centímetros para poder instalar el tubo que sostiene la señal y puede tardar hasta dos horas la instalación de cada señal”, explica.
Según la funcionaria, alrededor de 1.300.000 personas se han visto afectadas por los daños y robo de los letreros del SITP.
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“Sobre todo en estratos 1, 2 y 3 en cinco localidades que son donde más se toma el bus del SITP: Usaquén, Suba, Engativá, Kennedy y Teusaquillo”, afirma.