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Este domingo 12 de octubre de 2025, Bogotá vivió un momento histórico en su transformación vial. En apenas 4 segundos, los puentes vehiculares ubicados en la intersección de la avenida de las Américas con Calle 13 y Carrera 50, en la localidad de Puente Aranda, fueron derribados mediante una implosión controlada, marcando el inicio del megaproyecto La Nueva 13, que busca reorganizar la movilidad en el suroccidente de la capital.
La jornada, que fue transmitida en vivo en Noticias Caracol en vivo y la Alcaldía Mayor de Bogotá, comenzó desde las primeras horas del día con un operativo de seguridad, evacuación y control ambiental. A las 10:45 a. m., tras el sonido de las alarmas de advertencia, se activaron los detonadores que hicieron colapsar las estructuras hacia su centro de gravedad, en una maniobra milimétrica que fue supervisada por ingenieros estructurales y equipos de emergencia.
La intersección intervenida es una de las más transitadas de Bogotá, donde confluyen la Calle Sexta, la avenida de las Américas, la Calle 13 y la Carrera 50. Las estructuras, construidas hace más de 45 años, ya no respondían a las exigencias actuales de tránsito ni a los planes de expansión del sistema TransMilenio.
Según el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), la demolición convencional habría tomado cerca de un año, mientras que la implosión permite habilitar el frente de obra en cuestión de días. Esta decisión fue tomada para acelerar la construcción del Tramo 1 de La Nueva 13, una megaobra que reorganizará el tránsito mixto, el transporte público y los cruces peatonales.
La implosión fue ejecutada por la empresa ATILA, especializada en demoliciones controladas, con más de 25 años de experiencia en Colombia y 68 proyectos realizados, entre ellos los edificios Space y Mónaco en Medellín, el Puente Chirajara, la Alcaldía de Manizales, el Coliseo Humberto Perea en Barranquilla, y los Silos Argos en Yumbo.
Para lograr una caída controlada, se realizaron más de 4.550 perforaciones en los tableros y columnas de los puentes, donde se instaló Indugel, un explosivo industrial de hidrogel diseñado para demoliciones urbanas. La energía liberada fue dirigida hacia el interior de las estructuras, provocando su colapso sin afectar edificaciones cercanas.
La Alcaldía de Bogotá estableció tres anillos de seguridad alrededor del punto de implosión:
Desde las 7:00 a. m., se inició la evacuación de residentes y comerciantes del sector. Además, se implementaron medidas especiales para proteger la fauna urbana, incluyendo el ahuyentamiento de aves y la reubicación de 178 árboles. En total, se generaron 7.900 metros cúbicos de residuos de construcción y demolición, compuestos principalmente por concreto y asfalto, que serán reutilizados en la misma obra para relleno y estabilización de vías.
El Tramo 1 del proyecto La Nueva 13 contempla una intersección de tres niveles, diseñada para reorganizar el tránsito mixto, el transporte público y los cruces peatonales:
Además, se construirán tres pasos semideprimidos peatonales, dos kilómetros de ciclorruta y más de 100.000 metros cuadrados de espacio público, de los cuales casi la mitad serán zonas verdes. Este rediseño busca mejorar la conectividad entre el occidente y el centro de la ciudad, reducir los tiempos de desplazamiento y optimizar el uso del espacio urbano.
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ÁNGELA URREA PARRA
NOTICIAS CARACOL