En el departamento de Risaralda avanzan las gestiones para que Yoko, único chimpancé en cautiverio en Colombia, pueda ser trasladado al santuario Sorocaba, en Sao Paulo, Brasil. Los trámites para la mudanza del animal comenzaron después de que dos chimpancés que vivían en el Bioparque Ukumarí fueran sacrificados.
Yoko creció en medio de maltrato animal y violencia. Julio César Gómez, director de la Corporación Autónoma Regional de Risaralda, CARDER, reveló que el chimpancé "fue rescatado de la garras de un narcotraficante que lo tenía humanizado y esclavizado. Este santuario ha hecho un proceso muy importante y la idea es que tenga una vida digna, como se la merece."
Luego de pasar muchos años en poder de mafias, Yoko fue recuperado por las autoridades y llevado a Pereira, en donde, desde entonces, recibe cuidados especiales.
"Siempre se le están haciendo cosas novedosas, desafiando su intelecto, porque es una animal que tiene la capacidad de dar más que los otros animales", expresó Delio Orjuela, veterinario y cuidador del Bioparque Ukumarí.
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Por su parte, Julio Oyuela, médico veterinario, advierte que "a pesar de que es una especia sociable, este animal no convive normalmente con otros chimpancés, o por lo menos aquí no lo hizo".
Sin embargo, luego de la muerte de Pancho y Chita, chimpancés que vivían en el Bioparque Ukumarí, en la ciudad de Pereira avanzan las gestiones para poder llevar a Yoko a un santuario en Brasil.
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El director del CARDER habló de las probabilidades que existen para el traslado: "Hemos abierto la posibilidad de que Yoko viaje a Brasil al Proyecto Gran Simio, hemos tenido la oportunidad de hablar con el secretario general del proyecto, Pedro Interia, y el representante en Colombia, Luis Domingo Gómez. Realmente hay toda la voluntad de la corporación y del Bioparque Ukumari."
El siguiente paso del proceso de traslado es determinar si el chimpancé puede adaptarse a las condiciones del santuario Sorocaba y cómo se llevará a cabo la gestión. La senadora de la Alianza Verde, Andrea Padilla, dice que "a nuestro país le corresponde conseguir el guacal, donde iría Yoko, que tiene unas especificaciones muy estrictas, hacer todos los procesos de cuarentena y tramitar los permisos zoosanitarios. El santuario, por su parte, asumirá los costos de traslado".
Entretanto, Yoko, único chimpancé en cautiverio en Colombia, permanecerá bajo protección y atención especial en el Bioparque Ukumarí, en donde por años le han garantizado un hábitat específico.
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