Con promesas de lanzarla a la fama, hombre secuestró a niña de 10 años

La sacó de su casa en Villavicencio y la puso a pedir limosna en Santa Marta. Un celular fue clave para hallar a la menor once días después.

El presunto secuestrador, de 58 años, aprovechó “la ingenuidad” de la familia para intentar convencerla de permitirle llevarse a la niña, informó el general Fernando Murillo, director del Gaula de la Policía.

“Encontramos que había puesto a una hija adulta desde Bogotá a que se hiciera pasar por esta cantante”, Francy, una artista de música popular de la que la menor es fanática.

Incluso llegó a decir que la estrella le pagaría 5 millones de pesos solo por cantar con ella.

“La familia no acepta lo que les estaba prometiendo este individuo y él decide raptar la niña”, dijo el director del Gaula.

Fue entonces, el pasado 10 de enero, cuando el sujeto se llevó a la menor.

Las autoridades empezaron a tener pistas de su paradero cuando el señalado secuestrador vendió el celular de la niña en una compraventa de Puerto Berrío, Antioquia, para conseguir recursos y continuar su viaje hacia la costa Atlántica.

Cuando el comprador del teléfono lo prendió, se activó su señal en los sistemas de rastreo de los investigadores, que llegaron al sitio, recuperan el aparato y descubrieron un video de la pequeña cantando la música de su artista favorita.

Quien la grabó fue el captor, supuestamente, con la promesa de enviar el video a la cantante Francy. Finalmente llegaron a Santa Marta, donde autoridades hallaron a la niña pidiendo limosna en la terminal de transportes.

El secuestrador, ya capturado, “siempre le decía que si llegaba a informarle a un policía que ella estaba en contra de su voluntad, pues prácticamente que le iba a ir mal”, indicó el general Murillo.

La niña fue trasladada a Bogotá, donde se reencontró con su familia, mientras el señalado delincuente fue enviado a Villavicencio para responder por el delito de secuestro simple.

Sin embargo, parientes y autoridades esperan los resultados de Medicina Legal para establecer si la niña sufrió algún tipo de agresión por parte de su captor.