Las víctimas fueron dos hombres, una mujer y un menor de edad. Al parecer, dos carros transportaban gasolina de contrabando.
Según familiares de los fallecidos, dos vehículos se dedicaban al transporte ilegal de combustible y generaron el accidente en su afán de no ser descubiertos.
Los cuerpos fueron recogidos por la comunidad wayú, quien decidió hacer las honras fúnebres bajo sus leyes.