Sandra Meza, jefe de enfermeras del hospital Erasmo Meoz de Cúcuta, falleció el pasado fin de semana tras resultar contagiada de coronavirus en sus labores. Sus colegas le hicieron una conmovedora despedida, entre aplausos y lágrimas.
Era una mujer con “sentido de vocación por su profesión”, con “ganas de ayudar sin mirar a quien”, recuerda el médico Carlos Iván Perea Guerra.
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Mientras ella daba su último suspiro, en la carpa COVID del hospital su mamá luchaba por su vida, permanecía conectada a un respirador, pero hoy, cinco días después, falleció. Se fue sin saber que su hija también había muerto.
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“Su madre falleció por una infección respiratoria por COVID-19. Quiero enviarle un mensaje de solidaridad a toda su familia, a su hermana Jaqueline, quien también es enfermera de nuestra institución”, dijo el doctor Perea.
Los Meza, devastados, permanecen unidos y en oración, pues otros miembros de la familia se contagiaron de COVID-19 y hoy esperan ganarle la pelea al virus que ya les arrebató a dos de sus seres queridos.
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