Este fin de semana en Cali hubo un logro agridulce en medio de la emergencia por coronavirus COVID-19 . Este 11 y 12 de julio de 2020, las autoridades registraron una reducción en el número de fiestas y desórdenes en las calles, en comparación con otros fines de semana.
Sin embargo, aumentaron las llamadas en las líneas de emergencia.
En total, fueron intervenidas 120 rumbas en vía pública, lo que, al parecer, no significa que el comportamiento de los caleños haya mejorado, pues se estima que este fenómeno ha mutado al interior de las viviendas, donde las patrullas de cuadrante acudieron en 404 oportunidades.
En la ciudad se recibieron 4.000 requerimientos ciudadanos a las líneas de emergencia. En anteriores fines de semana se habían recibido hasta 2.000, a excepción del puente del 13 de junio, cuando se registraron 20.000.