Desde el interior de ese penal, Jorge Rodríguez, uno de los reclusos, denunció las múltiples irregularidades de las que son objeto los presidarios por parte de los guardias y las directivas del Inpec.
Las condiciones sanitarias y la alimentación son las problemáticas que sienten más fuertes. Según Rodríguez, la última comida la reciben a las 3:00 de la tarde.
La cárcel de Sonsón tiene una capacidad para 75 reclusos y en la actualidad están recluidos en este lugar 230, quienes también denunciaron que en el momento no tienen atención médica.
La huelga de hambre se mantendrá por tres días. Los reclusos esperan que el Inpec solucione las dificultades que ellos están denunciando.
Updated: agosto 11, 2015 05:09 p. m.