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Un grupo de policías sufrió una asonada en Bucaramanga cuando atendía un caso de violencia intrafamiliar. En medio del desorden, un joven de 20 años recibió un disparo en la cabeza por parte de un agente.
“En ese momento el procedimiento fue obstruido con una asonada contra la patrulla, se intentó despojar con los elementos del servicio y finalmente se impide que se garantice los derechos fundamentales a la mujer allí presente”, indicó el general Luis García, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga.
El joven herido, que supuestamente intentó hurtar el arma, tiene antecedentes por homicidio, hurto y violencia intrafamiliar.
Los familiares del muchacho, que se hora se debate entre la vida y la muerte, dieron otra versión: “¿Que todos contra la Policía? Eso es una mentira porque había poquita gente y el policía no tuvo por qué haber disparado y mira en la cabeza, o sea, porque nadie lo atacó, nadie, nada; él (el joven herido) parte la botella y no lo alcanzaba a partir cuando ya le pegó el tiro en la cabeza”.
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Ante lo ocurrido, la alcaldía pidió el esclarecimiento de los hechos y mayor entrenamiento para los uniformados.
Las autoridades calculan que al menos 220 uniformados han sido atacados atendiendo procedimientos.
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El reciente fin de semana un patrullero resultó herido con arma blanca.
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